La historia de Jonathan nos invita a ser más agradecidos con esas pequeñas cosas que damos por sentado sin ser conscientes de que son regalos extraordinarios que no todos tienen la dicha de recibir. El simple hecho de tener salud, deberíamos agradecerlo cada día.
Para Jonathan viajar en avión y ver por primera vez el mar era un gran sueño. Desde que fue diagnosticado con cáncer sus días cambiaron, tuvo que someterse a intensivos tratamientos y permanecer ingresado en el hospital por largos períodos de tiempo.
Afortunadamente, su anhelo de viajar a la playa con su familia se hizo realidad recuperando la sonrisa en su rostro.
Cuando estaba en el avión en el que viajaría a las playas de Mazatlán en México, fue sorprendido por la tripulación que le dedicó un emotivo mensaje. Lo nombraron capitán del vuelo ante la emoción de todos los pasajeros.
“Jonathan, toda tu familia, tus seres queridos y amigos y toda la tripulación de sobrecargos de esta tarde quieren felicitarte por tu lucha que estás ganando, y quieren decirte que disfrutes tu estancia en Mazatlán”, dijo con la voz entre cortada Cynthia Borges, una de las tripulantes.