«Nos ha dejado un gran dolor porque no nos lo esperábamos. Esta enfermedad me la quitó», son las palabras entre lágrimas de Arturo Morales, un hombre enfermo hispano que acaba de perder a su esposa por coronavirus.
No puede contener las lágrimas al recordar el día en que se despidió de su esposa Besabed Román por teléfono antes de que muriera en un hospital de Chicago.
Pero él no sufre sólo por la pérdida irrreparable de la mujer de su vida, con la que estuvo casado 31 años, se mantiene en constante zozobra.
Los médicos le han obligado a estricto confinamiento, ya que en caso de contagiarse, le advirtieron que no llegaría a una semana, debido al asma que padece, y porque tiene un solo pulmón.
Arturo usa oxígeno las 24 horas del día, los 7 días de la semana y duerme con una máquina de respiración por la noche
Además, usa una máquina de tratamiento con nebulizador dos veces al día. Son sus hijas quienes semanalmente le llevan las compras a través de una reja, para así evitar toda posibilidad de contagio.
Irene, una de las hijas, confiesa el dolor de haber perdido a su madre y ni siquiera poder abrazar a su papá.
Besabed falleció el 31 de marzo tras 2 semanas de complicaciones por el coronavirus, dejando a su esposo, 4 hijas y un hijo de 14 años
Arturo se enfrenta también al agobio económico, ya que junto a su esposa vendía los tamales que ella cocinaba. Por su salud, no puede trabajar y con la partida de Besabed, se encuentra sin rumbo, sin saber qué hacer ni de qué vivir.
En vista de la difícil situación, sus hijas decidieron abrir una página de GoFundMe sin imaginar la respuesta abrumadora que tendrían. Es muy alentador saber que todavía podemos tener esperanza en la humanidad, su historia tocó tantas almas que a la fecha ya han reunido más de 11.000 dólares, de 10.000 dólares que era la meta.
«Sabemos que algún día todos moriremos, pero no de esta manera, ella murió sola sin tener a su esposo e hijos a su lado», se puede leer en la página. «Acabamos de perder a una mujer increíble y ella siempre será extrañada. Por favor tome precauciones, manténgase a salvo y por favor quédese en casa».
«Mi hermano tiene 14 años y nuestra madre era su mejor amiga. Nuestro padre está devastado porque ha estado con nuestra madre durante 31 años», explicó su hija Lucía.
Ante la respuesta de tanta gente, Lucía decidió agradecer el gesto con un emotivo mensaje:
«Es sorprendente cómo tantas personas están tocando sus corazones… De todo corazón, mi papá Arturo y yo, les queremos agradecer a todos por donar y de verdad que no lo esperábamos, y muchísimas gracias por estar con nosotros».
Después de que las sensibles lágrimas llegaran a los medios, las redes no tardaron en conmoverse por su situación, pero al mismo tiempo han alabado el profundo amor que lo unía a su mujer, algo que ya no es muy frecuente ver en nuestros días.
«Se miraba que este señor amaba mucho a su esposa. Dios le de consuelo a su corazón», dijo una persona.
«Eso se llama amor verdadero», agregó otro usuario. Mientras que don Arturo sólo quiere que nadie más pase por ese dolor y advierte:
«Les quiero decir que no traten a esta enfermedad como un juego. Esto está matando a la gente».
No te vayas sin compartir esta emotiva historia que ha tocado tantos corazones y no dejes de aportar con tu granito de arena para ayudar a este pobre hombre desconsolado, al que se le ha ido la mitad de su vida.