Lidiar con adolescentes no es un asunto sencillo y cuando hablamos de un salón de clases resulta común que en una u otra ocasión jueguen algún tipo de broma a sus profesores o entre ellos mismos.
Pero una “travesura” en especial se les escapó de las manos después de que la profesora terminara en urgencias por una broma que le realizó un grupo de alumnos.
Los chicos entre 12 y 13 años de la escuela Starling K-8 en Columbus, Ohio, llenaron el pomo de la puerta del salón de la clase con bananas y arrojaron el fruto y las cáscaras a su profesora de arte.
Si alguno parece gracioso, hay que decir que el asunto no sólo fue humillante sino peligroso pues la profesora sufre una alergia mortal a las bananas, una cuestión que era de conocimiento público.
Los chicos estaban informados de la condición de la mujer, incluso, en la puerta del salón hay un cartel en el que se lee “Zona libre de banana”, para que los estudiantes lavaran bien sus manos en caso de tener contacto con la fruta.
«Todos los niños sabían que la profesora es extremadamente alérgica a los plátanos. Si lo toca, entrará en shock anafiláctico«, dijo un oficial de seguridad a la policía.
Los hechos ocurrieron en noviembre de 2018 y 15 minutos después de la “broma” hubo que suministrarle a la educadora dos EpiPens y posteriormente llevarla a un centro médico tras sufrir un shock anafiláctico y su garganta comenzara a cerrarse.
Según se dio a conocer el hecho fue liderado por tres estudiantes de séptimo grado, los cuales fueron puestos a la orden de la corte juvenil.
Finalmente, los adolescentes recibieron libertad condicional por un tribunal de menores y la tendrán que cumplir en un hogar de acogida.
Por fortuna, la maestra cuyo nombre se mantuvo en anonimato, pudo recuperarse. Sin embargo, la aparente travesura de los chicos pudo haber tenido un costo muy alto en la vida de la educadora que impartía clases de arte.
Según informó el Departamento de Policía de Columbus, los asaltos por delitos graves contra maestros han aumentado en este año 2019, con 30 casos registrado desde el mes de enero.
Por fortuna, en esta ocasión la acción de los chicos no produjo daños irreparables en la vida de la mujer pero no por eso quedaron exonerados de comparecer ante la justicia. La maestra terminó en el hospital pero ellos tuvieron que enfrentarse a las autoridades.
Antes de irte comparte esta noticia y ayúdanos a crear consciencia sobre este tipo de bromas. Es hora que los chicos aprendan a hacerse responsables de sus actos y mediten sobre ellos antes de cometerlos.