Hay muchas personas sin valores que tratan de apoderarse de lo ajeno, y por eso es importante dar a conocer historias como esta que advierten el modo de operar de estos seres inescrupulosos.
Una mujer residente de Bogotá, en Colombia fue objeto de una estafa después de que le hicieron el cambio de su tarjeta bancaria en su propia casa. Estas personas mañosas le colocaron de fondo la misma música que usa el banco para evitar que su víctima sospechara.
La mujer fue engañada con una propuesta atractiva, pero no pasó mucho tiempo para que se diera cuenta de que no se trataba de algo bueno, y que había cometido un error. Le habían robado de la cuenta casi 4.000 dólares en transacciones que desconocía.
Parece mentira, pero esta mujer del sur de Bogotá fue víctima de una estafa en su propia casa, después de que los ladrones lograron hurtarle 3.920 dólares una vez que se quedaron con su tarjeta del banco.
La mujer afectada reveló que recibió varias llamadas telefónicas en las que le ofrecían beneficios atractivos como el cambio de su tarjeta actual por una nueva con intereses más bajos.
“Las llamadas tenían hasta la misma música que usan en las entidades bancarias”, afirma la víctima.
Cuando le ofrecieron hacer la transacción en su casa ella accedió y acordó una cita para que el supuesto personal del banco la visitara.
Según lo pautado, una mujer con un carnet y documentación a simple vista oficial se trasladó hasta la vivienda y haciéndose pasar por funcionaria de la entidad realizó el cambio de la tarjeta.
La supuesta funcionara del banco le hizo entrega de una tarjeta nueva en un sobre sellado y le pidió a la víctima que entregara la antigua.
En ese momento, la presunta empleada del banco hizo como que estuviera destruyendo la tarjeta vieja, pero hábilmente se quedó con el microchip para hacer de las suyas.
El mismo modo operandi utilizó el timador para estafar a varias personas, iba de casa en casa robándoles.
Posteriormente, la víctima fue contactada por el personal real del banco por los grandes movimientos de sus cuentas.
Cuando respondió que ella no reconocía esas transacciones porque no las había hecho, y dijo que había recibido la visita de una asesora descubrió que todo era un engaño.
La afectada no se explica cómo el personal de la entidad bancaria le entregó a los delincuentes 3.400 dólares. El resto del dinero fue hurtado virtualmente.
Las autoridades competentes iniciaron una investigación que aún sigue en proceso, esperamos que puedan detener a los miembros de esta red de estafadores.
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