Muchas cosas han cambiado en esta época, ha habido grandes avances en la sociedad, pero por desgracia algo que aún no ha cambiado es el afán de los adultos de clasificar las cosas como aptas para las niñas y otras como aptas para los niños.
Los tabúes a este respecto aún son muy comunes. Esto lo sabe una mamá que decidió cumplir el sueño de su hijo de ir al parque de Disney vestido como una princesa.
Evan tiene cuatro años, y le pidió a su mamá, quien en realidad es su mamá adoptiva, que lo vistiera como a Blanca Nieves, ella no se sentía tan segura de hacer eso, pero dado que Evan estaba muy emocionado con la idea, decidió cumplirle su sueño.
El pequeño Evan es autista y padece microcefalia, que es un defecto de nacimiento que se caracteriza porque la cabeza de quien la padece es más pequeña de lo normal, Evan desarrolló dicha enfermedad debido a las drogas que consumía su madre biológica cuando estaba embarazada.
Así que ahora Eeka Rocha McLeod, madre adoptiva del pequeño, tiene a Evan consigo y trata de ser una buena madre para él y para sus otros hijos.
Eeka decidió cumplir el sueño de su pequeño hijo y lo llevó a Disneyland vestido como la princesa más famosa del mundo: Blanca Nieves, y además subió fotos de ese día a sus redes sociales, en el que Evan posa feliz con su disfraz de princesa.
“Al principio pensé que estaba confundido, pero luego noté que realmente estaba decidido de querer vestirse como Blanca Nieves”, declaró Eeka.
Los elogios para la mamá de Evan no se hicieron esperar, ya que los internautas piensan que es de lo más tierno dejar que el pequeño se vista así, y no hacer caso de los estereotipos que tienen que ver con lo que es adecuado para cada género.
Por desgracia, Eeka ha comentado que así como se han encontrado con personas que aplauden la situación, también hay otras que se burlan de Evan y tratan de hacerlo sentir mal, pero ella siempre tiene las palabras correctas para que el pequeño se olvide de dichos incidentes.
“Es triste que aún haya personas que tengan la mente tan cerrada, pero yo no puedo hacer nada por ellos”, declaró Eeka.
Evan ha asistido a Disneyland vestido de diferentes princesas, pero también de diferentes villanos, pero no por eso deja de ser una niño tierno y amable que se divierte como cualquier otro.
Evan es un niño feliz
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