Casarse es un ritual muy importante que está presente en todas las culturas. Cuando una pareja decide unirse suele hacerlo con la presencia de sus más allegados familiares.
Sin embargo, hay quienes utilizan de forma indebida la figura del matrimonio para obtener ganancias de ello. Como este reciente caso en la provincia de Zhejiang al este de China.
Desde hace tiempo, el gobierno chino está llevando a cabo importantes cambios a nivel de obras públicas en el poblado de Lishui. Estos acontecimientos han desencadenado que sus habitantes tengan que mudarse a otros lugares.
Es por ello que las autoridades se han visto obligadas a idear un programa de compensación a sus habitantes para evitar más desalojos. ¿En qué consiste dicho programa?, en otorgarle una vivienda a las personas inscritas en el registro civil de la zona en cuestión.
Esto desató la ambición de la familia del señor Pan, quien utilizando las leyes a su favor, se divorció y casó en varias oportunidades con varios familiares suyos. El número de matrimonios llegó a la cifra de 23, en los que participaron hasta 11 personas de la misma familia.
¡23 matrimonios entre la misma familia!, incluso el señor Pan fue capaz de casarse con su propia cuñada con el objetivo de recibir el beneficio que otorga el Estado a las personas desalojadas por las reformas que se estaban realizando en la provincia de Zhejiang.
Pero la suerte del señor Pan no fue la mejor de todas, ya que las autoridades del registro civil pudieron constatar que algo extraño estaba pasando con los números de matrimonios entre la misma familia. Finalmente, comprobaron que se trataba de una irregularidad.
Denunciaron ante las autoridades y actualmente hay 4 miembros detenidos y los otros 7 están puestos en libertad bajo fianza mientras esperan el juicio.
“Vaya qué personas tan arriesgadas. Dicen que el gobierno chino es muy intolerante a los casos de corrupción. Ojalá y todo se arregle para bien”, comentó sorprendida una internauta.
Según las autoridades, el padre del señor Pan comentó que no estaban haciendo nada fuera de ley. Sin embargo, Tan Kai, un reconocido abogado de un bufet especializado en matrimonios en Beijing, dijo que aunque estaban utilizando vías legales para recibir beneficios, la manera en que lo estaban haciendo constituye un fraude al Estado.
Hay casos que realmente superan la ficción. La familia del señor Pan tendrá que darle muy buenas explicaciones a las autoridades para poder salir ilesos de esta numerosa “travesura”. A partir de ahora para ellos la palabra matrimonio tendrá otro significado.
Comparte esta loca historia entre tus amigos y familiares para que no se les ocurra trasgredir las leyes a su favor.