Abusar de alguien consiste en hacer uso de un recurso, o tratar a una persona de manera impropia, incorrecta, improcedente, ilícita o ilegal. La autoridad, por su parte, es el poder, la soberanía, el mando o la influencia de quien ejerce el gobierno.
Por lo tanto, podemos decir que el abuso de autoridad ocurre cuando quien debería servir y proteger se aprovecha de su cargo, de su uniforme y de sus atribuciones frente a alguien que está ubicado en una situación de vulnerabilidad o subordinación.
Cuando somos testigos de la injusticia con la que actúan algunos cuerpos policiales, no podemos menos que sentirnos indignados. Situaciones de agresiones a humildes trabajadores informales se repiten en todas partes del mundo, y las calles de la ciudad de Oaxaca, en México, también han sido testigos de esta triste realidad.
Recientemente se dio a conocer un caso ejemplar a través de un video que circuló por las redes sociales, en cuyas imágenes se observa a un hombre de la tercera edad y con problemas de audición, siendo despojado de unas hermosas sillas que él mismo elabora con sus gastadas manos, por un grupo de supuestos “agentes del orden”.
El hombre de 85 años se las ha visto muy difíciles para poder sobrevivir, sobre todo a raíz del brote pandémico de coronavirus, debiendo salir a la calle a vender su artesanía. Sin embargo, ese día funesto y vergonzoso para todo aquel se llame funcionario, no contó con que lo perdería todo.
El caso fue denunciado en todas las plataformas de comunicación digitales, causando gran indignación entre miles de usuarios. En la grabación se puede ver y escuchar claramente a estos delincuentes de uniforme recoger varias sillas de madera, para luego subirlas en una camioneta y llevárselas. Para colmo, el anciano debe pagar una multa si desea recuperarlas.
“El señor se gana el pan de cada día, estos son sus muebles, sus sillitas, y ahora tiene que pagar una multa para poder rescatarlas. Estos son los inspectores del municipio de Oaxaca”, dijo la persona que grabó el momento cuando recogen las sillas y llenan un papel.
Pero, lo más triste es que aún no se sabe la razón que argumentaron para quitarle su mercancía, o si este humilde octogenario la pudo recuperar. Sin embargo, el hecho generó gran revuelo y molestia en quienes vieron el video, coincidiendo en que no debería sancionarse a una persona de la tercera edad que lo único que quiere es seguir trabajando.
“Es triste la situación que vive esta persona de la tercera edad, ¿por qué no a los vendedores ambulantes? No les hacen nada, tal pareciera que gozan de un privilegio, esta persona de la tercera edad ya no oye y le han decomisado sus muebles”, comentó un usuario.
Es un hecho incuestionable que las fuerzas de seguridad incurren en el abuso de autoridad sistemáticamente, apoyados en la violencia y haciendo un uso desmedido de sus atribuciones, socavando el derecho de los demás a la libertad, al trabajo y, por ende, a la vida.
¿Es que acaso estas situaciones son imperceptibles? ¿O será más bien que el ser humano, en su inmenso egoísmo solo se preocupa cuando una situación significa un atentado o una amenaza para sí mismo?
Al parecer, para poder trabajar y ganarse la vida hay que pedirle permiso al gobierno de @oswaldogarciaj y de @alejandromurat
Un señor de 85 años con discapacidad auditiva fue despojado de su mercancía por inspectores municipales.
«Oaxaca lo tiene todo», ¿no?
Jódanse. pic.twitter.com/xEXNlUE1aD— Pablo Perro (@Es_pinocho) October 23, 2020
Esto ocurre a diario, desde siempre. No se necesita una placa, o un cargo político, tampoco dinero, ni violencia física; sin embargo, son estas las formas más comunes que adoptan algunos policías y que deben ser denunciadas y sancionadas. Comparte esta noticia con tus seres queridos.