Este es el conmovedor momento en el que un niño sordo rompe en llanto al escuchar la voz de su padre por primera vez en mucho tiempo, ya que le arreglaron recientemente su dispositivo para la audición.
Él se llama Luiz Gustavo, tiene nueve años y su implante auditivo dejó de funcionar hace varias semanas, lo cual lo dejó en total incertidumbre ya que su familia no podía cubrir los gastos de la reparación.
La historia se desenvuelve en Bueno Brandão, Brazil. Cuando todos en la escuela supieron lo que ocurrió con Luiz, una de sus profesoras llamada Caleny Augusta de Rosa sugirió hacer una rifa en beneficio de su caso, la cual fue todo un éxito. «Una vez que las personas se enteraron de las dificultades de Luiz Gustavo, muchos residentes que ni siquiera lo conocían apoyaron la campaña», comentó Caleny.
En menos de 15 días ya habían recaudado los fondos necesarios para reparar el dispositivo del afortunado niño.
«La respuesta fue increíble, quedamos en shock con la cantidad de personas que apoyaron generosamente a nuestro hijo», comentó Athais, mamá de Luiz.
Para mostrar el agradecimiento y lo significativo que fue para la familia el esfuerzo de esa profesora, y de tantas personas que colaboraron, Juliano (el papá de Luiz) registró en video el momento en el que le pusieron el nuevo implante.
Al principio no funcionó… «Se lo ajusté, y el instante en el que Luiz Gustavo escuchó mi voz no tiene precio…», dijo Juliano. El niño rompe en llanto ya que no puede contener la emoción.
Luiz nació sordo, pero a los tres años le cambiaron la vida con un dispositivo que fue quirúrgicamente implantado en su sistema auditivo. Al conectarse, el procesador recibe señales codificadas que luego son traducidas por simuladores eléctricos.
Una pequeña carga eléctrica es enviada a las fibras del nervio auditivo y así llega la sensación de sonidos que puede reconocer el cerebro.
Durante seis años estuvo llevando una vida relativamente normal, trabajando con terapeutas del discurso para mejorar su comunicación cotidiana. Fue hace poco que el dispositivo dejó de funcionar y lamentablemente el mantenimiento era demasiado costoso para la familia, lo cual dejó al pequeño en incertidumbre durante varias semanas.
Afortunadamente está rodeado de personas buenas, que lo aprecian y lo quieren mucho tanto a él como a su familia.
Gracias a los esfuerzos de todos ahora Luiz Gustavo puede escuchar no solo la voz de su padre, sino de casi todo lo que pasa a su alrededor para que su problema de nacimiento no interfiera en su vida cotidiana.
De este pequeño podemos aprender a agradecer esas cosas que disfrutamos cada día y que damos por sentado, no hace falta perder algo para valorarlo de verdad. Si puedes ver, escuchar, sentir los abrazos de quienes más amas, entonces eres muy afortunado y debes ser capaz de reconocerlo.
Es imposible no conmoverse con la reacción del pequeño cuando pudo volver a escuchar después de mucho tiempo.
Además, siempre tendrá ese conmovedor video para recordarle cuánto lo quieren sus allegados.