Confiesa que después del baño congelado “le viene de perlas orinar sobre sus pies”, pero resalta que lo que en realidad es bueno es beberse su orina al terminar el baño.
La artista le pegó un buen sorbo al orine que tenía en una taza entre sus manos.
Aunque parezca insólito, para la reina del pop beberse su orina es un truco de belleza que está en pleno auge, es capaz de mejorar el estado del cutis, ayuda a perder peso y a verse más joven.
La sensación tan desagradable que puede producir ingerir una taza llena de orina debe tener una gran recompensa para quien se atreva a tener este hábito.
Hasta el momento no hay evidencias científicas de que el truco de belleza conocido como orinoterapia tenga beneficios sobre el organismo. Algunos profesionales de la salud alertan a los pacientes sobre esta práctica, consideran que beber orina en exceso podría causar una acumulación de residuos tóxicos en los riñones.
Madonna no hizo ningún tipo de advertencia respecto al hábito de beber orina como una práctica de belleza y salud.
Ante los riesgos que puede representar ingerir la orina, algunos seguidores de la cantante se mostraron indignados alegando que debió resaltar el peligro de lo que hizo instando a los demás a consultarlo con su médico.
Debido a que es un personaje influyente en todo el mundo, sus acciones pueden desencadenar que otros se motiven a seguir su ejemplo y en este caso no es recomendable.
La ciencia no aprueba la práctica de beber orina como un hábito que favorece la salud.
La orinoterapia comenzó hace varios siglos, y no se ha hecho ningún estudio científico sobre sus beneficios. De hecho, los médicos aseguran que puede causar insuficiencia renal.
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