Christina Burton no podía imaginar que un sencillo procedimiento para engrosar sus labios, la dejarían con «labios de salchicha» tan horribles, que sus propios amigos quedaron en shock al ver las fotos que compartió.
La joven de 29 años es originaria de Wythenshawe, en Gran Manchester.
Burton ha revelado que tras haber pagado alrededor de 95 dólares por un tratamiento para que le realicen en su domicilio, la crema anestésica utilizada hizo que sus labios se hincharan de una manera descontrolada, al punto que su garganta se cerró y tenía dificultades para respirar.
«Pensé que mis labios iban a explotar, el dolor era irreal. No pude tragar nada. Intenté tomar antihistamínicos y analgésicos para ayudar con la hinchazón y me puse hielo, pero no hacían más que crecer», dijo Christina.
«La hinchazón era tan fuerte que subía por mi nariz y cerraba mi garganta y nariz. Estaba luchando por respirar. Cuando llegué a ese punto, cuatro horas después de que me inyectaron, tuve que llamar a una ambulancia», continúa.
Christina confesó que fue una buena decisión no haberse ido a dormir, ya que simplemente pudo no haberse despertado.
Los servicios de emergencia tuvieron que ponerle adrenalina, oxígeno y un nebulizador.
Pero tras no poder controlar la situación, la llevaron al hospital Wythenshawe de inmediato, donde se le administraron esteroides, antiinflamatorios y antibióticos antes de controlar su estado durante la noche.
«Ni siquiera podía abrir la boca porque mis labios eran tan pesados que daba miedo», confiesa.
Cuando Christina inicialmente compartió las fotos de su infierno alérgico, amigos y familiares pensaron que les había puesto un filtro y se rieron de las imágenes. Sin embargo, cuando se dieron cuenta de que eran reales, se quedaron atónitos, y alguno de ellos incluso vomitó del puro shock.
«Pensaban que era un filtro de Snapchat, parecía literalmente un pato», dijo la angustiada joven.
Christina se sometió a este tratamiento en septiembre pasado, pero ahora es que las imágenes se han vuelto virales. Incluso confiesa que en algún momento se le pasó por la cabeza volver a rellenar sus labios, pero después meditó mejor y ha resuelto no hacérselo más.
«Lo reservé y lo cancelé porque la idea de pasar por eso otra vez … simplemente no puedo, no vale la pena. Podría haberme matado, ¿quién se lo explicaría a mis hijos?«, reflexionó.
Tras ver que pudo haber fallecido, la madre de dos ha querido compartir su historia para advertir de su terrible experiencia a otras mujeres sobre las reacciones alérgicas potenciales que pueden tener las personas cuando se someten a un relleno de labios. Y sugiere la necesidad de asesorarse bien antes de decidir sobre un tratamiento invasivo.
«Le diría a cualquiera que esté pensando en rellenarse los labios que se asegure de que sea con alguien que esté completamente calificado y que haya recibido la capacitación adecuada, que sepa qué productos están usando y estén certificados», advirtió.
No te vayas sin compartir la experiencia de esta mujer en en tus redes, podría servir de advertencia para muchos.