Carolynne St Pierre había sido siempre una madre normal, muy ingeniosa y sobre todo muy entregada: adoraba a su familia y se dedicaba a ellos en cuerpo y alma. Trabajaba como comadrona ayudando a traer niños al mundo. Pero un día le diagnosticaron cáncer de hígado. Decidió que quería dejar este mundo de la misma manera en la que había vivido siempre: rodeada de sus seres más queridos, por los que lo había dado todo durante su vida.
El fotógrafo Preston Gannaway quiso documentar la vida de Carolynne y su familia, y cómo lucharon contra el cáncer. Es una historia de cómo lidiar por cuidar de la familia mientras batallas contra una enfermedad terminal. Su historia llegó al periódico Concord Monitor, y Gannaway se ocupó de conseguir todas las fotos para crear una serie, Remember Me. Esta serie de fotos conseguía mostrar cómo la familia, trastornada por tal tragedia, logró mantener a todos sus miembros más unidos que nunca.
Este es EJ, el hijo de Carolynne. Tan sólo tenía 5 años cuando a su madre le diagnosticaron cáncer. Su compañía era lo que daba fuerzas a Carolynne para seguir adelante.
Los viajes en familia también ayudaron a Carolynne a sobrellevar su enfermedad y a seguir luchando.
Carolynne y Rich, su marido, pasaban largos ratos en el hospital, al que les tocaba acudir con frecuencia.
A medida que pasaba el tiempo, el cáncer avanzaba y le quitaba fuerzas a Carolynne. Estaba tan cansada, que salir a jugar con EJ se le hacía cada vez más difícil.
Poco antes de Navidad Rich tuvo que empezar a prepararse para el funeral de su mujer. Los médicos no le auguraban a Carolynne mucho tiempo más.
Carolynne quiso grabar algunos vídeos para sus hijos antes de morir. Su hermana y su prima, intentando disimular la enorme pena que sentían, le ayudaban a hacerlo con la mejor de sus sonrisas.
El último día de Carolynne transcurrió tal y como ella lo había querido: rodeada por su querida familia. Su hija Melissa se preparaba para una competición de gimnasia, para conseguir evadirse del drama de la pronta muerte de su madre.
Murió rodeada de su querida familia, después de un largo beso en la frente de su amado esposo. Tal y como ella deseaba, todos estuvieron a su lado apoyándola hasta el final. Falleció en su casa en febrero de 2007 con tan solo 44 años de edad.
Ahora le toca a Rich cuidar solo de su familia. Se encarga de criar y cuidar a sus hijos, además de trabajar para poder traer dinero a casa, lo cual resulta agotador.
En la imagen, Rich riñe a Brian después de una discusión enfrente de la tumba de Carolynne. Es muy duro para todos 😥
Rich y EJ plantan árboles en memoria de Carolynne. ♥
El primer día que EJ regresó al colegio, toda la familia fue con él para darle apoyo. Querían que el pequeño no se sintiera solo porque su mamá ya no está allí para acompañarlo.
Rich apuntó a su hijo Brian a unos campamentos en Carolina del Norte como terapia. Los problemas en casa iban creciendo y pensaba que quizás un tiempo fuera de casa le vendría bien para aceptar la muerte de su madre.
Brian lloró desconsoladamente durante los campamentos… Lo único que Rich desea es que entre todos puedan ayudar a Brian a aliviar su enorme dolor.
No es nada fácil comprender el dolor que esta familia ha sufrido durante la lucha y derrota de Carolynne contra el cáncer. Remember Me muestra la dureza emocional que trae consigo una enfermedad terminal. Lo que le tocó sufrir a esta familia durante los últimos días y después de la marcha de Carolynne, no se puede explicar con palabras.
Para conocer el trabajo de Preston Gannaway, visita su página Facebook.
Todos lidiamos nuestras batallas. Comparte la de Carolynne con los demás.