Las redes sociales se han convertido en nuestra principal ventana de información, las publicaciones marcan una tendencia en los usuarios y muchas veces generan una ola de reacciones que abren paso a los más polémicos debates.
Eso fue justamente lo que ocurrió cuando Enedina Vance, de Ohio, madre de una bebé de aproximadamente seis meses de edad, publicó una fotografía en la que su pequeña lucía sonriente y con un “piercing” en su mejilla.
Desde que compartió la imagen en su perfil de Facebook incluso comenzaron a amenazarle de quitarle la vida.
Ella acompañó la fotografía con el siguiente texto:
«Se ve tan lindo, ¿verdad? Solamente sé que a ella le va a encantar y me lo agradecerá cuando sea grande. No es la gran cosa… ¡soy la madre de la niña y haré lo que quiera! Soy yo quien decido hasta que ella tenga 18. No necesito el permiso de nadie creo que es lo mejor, lo más lindo y prefiero que tenga su hoyuelo perforado. ¡MI BEBÉ, MI ELECCIÓN! ¡LA OPCIÓN DE LOS PADRES, LOS DERECHOS DE LOS PADRES! ¡No juzgue mi crianza de los hijos, todos criamos a nuestros hijos de manera diferente, no es de su incumbencia de todos modos!
Solo bastaron pocas horas para que recibiera miles de comentarios que cuestionaban severamente su actitud. Pero ella tenía un objetivo muy claro, que los usuarios de Facebook no conocían.
Las personas tenían razón de estar molestas por someter a un niño pequeño a tal sufrimiento por un capricho de la madre. La imagen era el centro de todas las críticas, a medida que se fue compartiendo las personas comenzaron a dudar si el piercing era real o se trataba de una foto editada con Photoshop.
Así fue como esta madre logró su objetivo, crear consciencia acerca del derecho de los niños a no ser sometido a cambios en su apariencia.
Muchos le escribieron: “Tu bebé no es una muñeca que puedes personalizar”, “¿Cómo pudiste hacerle eso a tu hija?”.
Ella quería que todos supieran darle el valor merecido a los derechos de los menores, criticando las prácticas culturales de mutilación genital y la circuncisión. Manifestó que se sentía decepcionada porque a nadie le importaba el verdadero enfoque de su mensaje, solo se fijaban en la apariencia de la niña.
Le parece “hipócrita” juzgarla por la perforación en el rostro de su bebé pero defender otras prácticas como la común circuncisión.
Enedina no se imaginaba que su mensaje causaría tanto revuelo, relató: “Tantos artículos diferentes, escritos con lenguas diferentes compartidas por todo el mundo. Es mucho más de lo que imaginé, estoy muy emocionada de que el mundo finalmente esté hablando sobre el derecho de los niños a la integridad física.
Quería que la gente se diera cuenta de un piercing en el rostro no parece tan malo cuando se habla de la mutilación genital infantil”.
“Nadie tiene derecho a modificar el cuerpo de otra persona con fines estéticos, ni siquiera los padres. Gracias a todos por sus comentarios, y lo más importante por ser parte de esta conversación global extremadamente importante”.
La madre compartió una nueva publicación en la que explicaba que la fotografía era editada con Photoshop y que no había perforado el rostro de su hija. “Fue un mal intento para editar la foto, pero sin embargo muchos creyeron que era real”, comentó Enedina.
Relató que no conservará consigo los comentarios de odio que recibió, comprende que es la manera de juzgar de las personas que querían proteger a su hija. Pero promueve la necesidad de crear consciencia sobre los derechos de los niños.
Puede decir que logró su propósito, porque miles de personas han hablado del tema y todo comenzó con su fotografía. Está comprobado el poder de las redes sociales para emprender grandes campañas, ¡compártelo!