En ocasiones creemos que los niños están algo desconectados de la realidad y sólo viven a través de sus mundos de fantasías y juegos pero ejemplos como la de este pequeño héroe seguro te hará cambiar de opinión, pues su madurez y agilidad ha salvado la vida de su maestra.
Max Meza, de 6 años, se convirtió en un verdadero héroe para Joyce Darr, su maestra sustituta en el jardín de infancia.
Esta mujer sufrió una terrible caída durante su trabajo y de no haber sido por la rápida acción del chico su vida se hubiese apagado.
Debido al accidente Joyce tuvo un trauma craneal, pues su cabeza impactó contra un objeto contundente durante la caída. Por fortuna, el pequeño Max estaba cerca y presenció la situación.
Este héroe, lejos de asustarse y entrar en pánico actuó mucho mejor que muchos adultos. Max se acercó a su maestra y le dijo que no se moviera, mientras él corrió por ayuda de un adulto para que llamaran al número de emergencias.
Max había recibido capacitación para primeros auxilios y sabía perfectamente cómo actuar ante una situación de estas, así que pudo mantener la calma con mucha madurez y controlar la situación hasta que llegaran los paramédicos.
La maestra se rompió el cráneo y tuvo hemorragia cerebral, por lo cual debió mantenerse 12 días internada en el hospital. No obstante de haber hecho algún mal movimiento en el momento de levantarla la situación podría haber sido mucho peor.
Por esa razón ella y su familia están muy agradecidas por la acción del pequeño.
Uno de los hijos de Joyce decidió obsequiar un par de zapatos nuevos en agradecimiento al héroe de su madre pero este no es el único regalo que recibió este pequeño. El departamento de policía local decidió honrar a Max por su valentía y realizaron una ceremonia especial en la escuela.
Frente a sus compañeros y demás maestros, el pequeño recibió un diploma de honor por su esfuerzo y lograr salvarle la vida a su maestra Joyce.
Además recibió una bicicleta como regalo extra de parte de los oficiales. No cabe duda de que él es merecedor de estos gestos y obsequios pues también ha dado una gran lección a los adultos: “los niños sí escuchan las lecciones”.
No olvidemos preparar a nuestros pequeños para que sean capaces de enfrentar las diversas situaciones que tiene la vida. Comparte la historia de Max y ayúdanos a que su acción inspire a otros niños y papás ¡Bravo chico!