A lo largo de la vida nos encontraremos con personas que sin darnos cuenta se convertirán en seres realmente especiales. Solo basta una cosa, que por muy mínima que parezca hará clip en nosotros haciendo una gran diferencia.
Esta es la historia de Broke O´Briant, una mujer que le dio una nueva oportunidad a un hombre que estaba completamente solo en la vida.
Broke O´Briant hace marketing en North River Village.
La primera vez que O´Briant escuchó hablar de Nathaniel Hudson fue a través de una llamada del hospital local donde vivía. El personal médico le informó que tenían a un señor mayor que estaba solo y necesitaba ayuda, su estado de salud desmejoraba con el paso del tiempo.
O´Briant se acercó al hospital sin saber que no solo le cambiaría la vida al señor, sino que también cambiaría la de ella. Al sr. Hudson le habían avisado que vendrían por él, así que cuando O´Briant llegó estaba listo luciendo un hermoso traje con sombrero.
El sr. Hudson estaba feliz de poder tener a alguien que se preocupara por él.
El primer día que compartieron O´Briant y el sr. Hudson asistieron a un concierto de Navidad, todo comenzó el 20 de diciembre del 2018. Al finalizar el concierto lo llevó a su casa y le preparó una habitación, había algunos detalles que O´Briant debía arreglar antes de llevarlo a su nuevo hogar.
El estado de salud del sr. Hudson era muy delicado, por lo que debió pasar una vez más una larga temporada en el hospital.
O´Briant se convirtió en el ángel guardián de un hombre que creía que lo había perdido todo.
Una vez que fue dado de alta lo trasladaron a North River Village, un lugar para personas mayores que les ofrece los cuidados que necesitan y una buena calidad de vida, este fue el nuevo hogar para el sr. Hudson. O´Briant comenta al respecto:
¡Estaba tan emocionado! Tantos empleados y patrocinadores valiosos ayudaron a donar ropa de cama, decoración y otros artículos para su nuevo lugar.
Me sentí muy bien sabiendo que estaba seguro y limpio con tres comidas al día, las enfermeras asegurándose que tomara sus medicamentos y nuevas amistades para levantarle el ánimo”.
El tiempo pasaba y O´Briant siempre estaba ahí para ayudar al sr. Hudson, no tenía ningún familiar así que se convirtió en una hija para él. Lo ayudaba con la limpieza, las facturas, las citas médicas y largas conversas donde alimentaban el alma y el espíritu.
Desafortunadamente, su estado de salud fue empeorando, le diagnosticaron cáncer. Una noticia que devastó a todo el personal que lo estaba atendiendo, especialmente a O´Briant.
El Sr. Hudson participaba en juegos, en el grupo de ejercicio, pero sobre todo amaba el teatro.
Después de más de un año de haber compartido, el sr. Hudson murió el 25 de marzo. Hudson era una persona muy cristiana, poco antes de fallecer cantó en la iglesia de North River Village.
He estado llorando toda la tarde y la noche pero estoy muy agradecida al saber que ahora descansa en los brazos de Jesucristo. Seguramente extrañaré a mi precioso amigo, pero lo volveré a ver. ¡Qué día será ese!”
O´Briant fue el ángel guardián para un hombre vulnerable y completamente solo. Espera poder realizarle una ceremonia en el futuro donde todos puedan honrarlo, debido a la pandemia por el COVID-19 el entierro fue muy sencillo. Por ahora, solo pide que lo tengan en sus oraciones.
Enviemos un mensaje de solidaridad a esta mujer que hizo tanto por un hombre que encontró consuelo después de tanto padecer. Comparte este gesto de amor.