Cristian Ruiz Rubio luchó contra un tumor cerebral inoperable con el apoyo de sus padres y de miles de personas que se conmovieron con su caso.
El niño de 7 años, de Málaga, acudió al centro de salud quejándose de un fuerte picor en uno de sus ojos en mayo del año pasado después de una actividad escolar.
Como le encantaba bailar, se presentó como voluntario en una representación de la película “Coco” que harían en su escuela. Ese día cambió por completo su vida y la de sus padres.
“Fue después de la actividad del colegio en la que lo disfrazamos y le pintamos la cara que sintió una picazón insoportable en uno de sus ojos y fuimos al centro de salud.
Ahí le recetaron unas gotas porque inicialmente pensaron que la irritación y picazón era una consecuencia de la pintura en su rostro”, dijo Noelia.
Pero una semana después la madre de Cristian notó que su ojo se movía de una forma rara y decidió trasladarlo al hospital.
“Después de que le realizaron un TAC de imagen me dieron la noticia los cuatro especialistas del hospital, quienes le resumieron que no podían operar y que al niño le quedaban aproximadamente siete meses de vida”, agregó la madre.
Desde entonces se movilizó acudiendo a las redes sociales para difundir su caso y pedir ayuda con el lema: “Todos con Cristian”, luchó para recaudar fondos para la causa.
Miles de personas se solidarizaron con la situación de la familia, los padres publicaron un emotivo vídeo de Cristian en su perfil de Twitter.
“Soy Cristian de Málaga, tengo 7 años y necesito su ayuda. Tengo un tumor cerebral pegado al tronco el cual no es operable por el sitio en el que está. No tengo mucho tiempo.
Compartan esta publicación para conseguir ayuda. Hoy por mí, mañana por ti”, decía la descripción del vídeo.
El caso llegó a oídos de varias personalidades del mundo del espectáculo y del deporte. El Málaga Fútbol Club compartió con Cristian ofreciéndole experiencias inolvidables, y apoyando a sus padres.