La muerte de una persona es dolorosa para los seres que la aman. Sin embargo, los órganos sanos del fallecido son la única esperanza para quienes esperan un trasplante para seguir viviendo. Un reconocido presentador brasileño murió, pero regaló vida después de su muerte a casi cincuenta personas.
Antônio Augusto Moraes Liberato, conocido como Gugu Liberato nació en São Paulo, Brasil, de padres portugueses. Fue un hombre dedicado a su trabajo y su familia. Casado con Rose Miriam di Matteo, con quien tuvo tres hijos: João Augusto, de 18 años, y sus gemelas Marina y Sofía, de 15.
Gugu logró la fama como presentador, su programa “Power Couple Brasil” y “Canta Comigo” le dieron popularidad y reconocimiento de su público.
Pero, los azares de la vida son impredecibles, y un día en su casa en Orlando en los Estados Unidos, sufrió un accidente doméstico mientras estaba haciendo reparaciones al aire acondicionado, en el ático de su domicilio.
El presentador de sesenta años, cayó accidentalmente del techo desde una altura de unos cuatro metros y sufrió una fractura de cráneo.
Fue ingresado de inmediato al Orlando Health Medical Center donde se le prestaron los cuidados que ameritaba la urgencia del caso. Su condición era grave y delicada.
“Fue asistido de inmediato por el equipo de rescate y admitido en el Centro Médico de Salud de Orlando, donde permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos, acompañado por el equipo médico local”, informó la oficina de prensa del presentador.
Sin embargo, a pesar de todos los esfuerzos médicos, ya no se pudo recuperar. Tres médicos, después de utilizar la escala Glasgow 3, que mide la conciencia y la progresión de las lesiones cerebrales, y previos exámenes realizados donde se encontró hemorragia intracraneal, lo declararon legalmente muerto.
«En virtud de la gravedad neurológica, no se ha indicado ningún procedimiento quirúrgico. Durante el período de observación se registró la ausencia de actividad cerebral», se dio a conocer en un comunicado oficial emitido por el personal médico.
La información fue ratificada por el doctor Guilherme Lepski, quien es neurocirujano en Brasil y fue llevado a Orlando atendiendo la solicitud de la familia del fallecido presentador, el cuadro clínico era irreversible.
El fatal diagnóstico fue realizado en presencia de la nonagenaria madre del fallecido de nombre Maria do Céu, los hermanos Amandio Augusto y Aparecida Liberato, y Rose Miriam Di Matteo, madre de sus hijos.
En vida, Gugu había expresado su deseo de donar sus órganos. Los médicos que lo atendieron les comunicaron a los familiares del magnánimo hombre que, con la donación, se podrían beneficiar hasta a cincuenta personas que están en espera de órganos.
Más allá del dolor y sufrimiento propio por la pérdida de su ser querido, la familia se queda con la satisfacción de haber hecho lo que Gugu siempre quiso.
Y los pacientes beneficiados y sus familias se lo agradecerán por siempre. Un acto de suprema grandeza humana, sin duda alguna.
Comparte esta emotiva y aleccionadora historia con tus familiares y amigos. Reflexionemos en cuanto a la importancia de la donación de órganos después de la muerte, dar vida a otros es trascender.