En tiempos de globalización, la conectividad mediante los Smartphones o teléfonos inteligentes se han convertido una de las tendencias más significativas y en un instrumento que facilita la vida; más aún, incluso podríamos decir que se han convertido en un miembro más de la familia.
No nos engañemos. Nos bañamos con él, dormimos a su lado.No hay momento del día en que no esté presente el teléfono móvil. Sin embargo, la triste historia de hoy nos mostrará las terribles consecuencias que el mal uso de esta tecnología tiene para la vida.
Alua Asetkyzy Abzalbek originaria de Kazajistán
Una adolescente de tan solo 14 años de edad falleció a causa de la explosión de la batería de su teléfono móvil que reposaba bajo su almohada mientras dormía.
Según informaron algunos medios, la infortunada joven identificada como Alua Asetkyzy Abzalbek, de Kazajistán, Asia Central, se quedó dormida escuchando música en su dispositivo que estaba conectado recargándose y en algún momento la batería colapsó y explotó causándole varias heridas en la cabeza y posteriormente, la muerte.
La joven fue hallada en su cama al día siguiente por su familia quien llamó inmediatamente a emergencias, sin embargo, demasiado tarde. Nada pudieron hacer los paramédicos por salvarle la vida a Alua.
Así quedó el teléfono móvil de Alua, que le provocó la muerte
Según investigaciones posteriores, el móvil debió haber explotado a primeras horas de la mañana, después de un intenso recalentamiento de la batería por tantas horas de exposición.
Hoy su desconsolada madre dice no poder creer lo que le ha sucedido a su pobre niña y asegura no poder concebir su vida sin ella. En las redes sociales, las amigas más cercanas de la menor han expresado su dolor ante tan lamentable pérdida:
“Eras la mejor. Hemos estado juntas desde niñas. Me cuesta estar sin ti, te extraño mucho. Me dejaste por siempre”, se puede leer en las notas.
Alua con su mejor amiga Ayazhan Dolasheva
A lo largo de los años, varios han sido los modelos de teléfonos móviles que han registrado explosiones y fallos, causando serios daños físicos a sus dueños o poniendo en riesgo la vida de muchas personas.
Sin embargo, aunque las fallas graves de esta tecnología están lejos de ser moneda corriente, en el caso de nuestra desafortunada Alua, hubo consecuencias letales.
A pesar de lo que hemos visto en esta historia, a muchas personas les seguirá pareciendo irracional que, después de haber gastado prácticamente su sueldo mensual en la compra de un teléfono de “última tecnología”, explote en sus manos o incluso en su rostro.
Sucede, sí, y aunque esto es algo inusual, ten en cuenta que todos estos aparatos tecnológicos trabajan con baterías recargables, y una situación en la que alcance una alta temperatura puede generar la detonación.
No se trata de acarrear las culpas a las baterías y si son o no seguras. El uso y el cuidado que tengan las personas con el manejo de los dispositivos son fundamentales para evitar todo tipo de accidentes. No es recomendable llevar el teléfono móvil a la cama.
Comparte esta noticia con tus familiares y amigos y toma previsiones a la hora de dejar tu teléfono o cualquier equipo electrónico expuesto a la corriente eléctrica más de lo normal. Alua desafortunadamente ya no puede escuchar estos consejos.