A él lo conocen en los medios como Manikandan, es un niño de 13 años que padece una enfermedad llamada Encefalocele, debido a eso parte de su cerebro está sobresaliendo de su cráneo.
Esto por supuesto hace que su rostro sea completamente impresionante para el resto del mundo ya que pareciera tener una especie de saco o bola de tenis que le sobresale.
Sus padres son de origen humilde y no tenían cómo pagar el costoso tratamiento que él requería, así que el Gobierno cubrió los gastos de la operación que necesitaba.
Esta enfermedad se presenta al momento del nacimiento y es muy poco común. Afecta el tubo neural de cerebro, es decir, el canal que se dobla y se cierra durante la tercera o cuarta semana de embarazo, de esa forma se articula el cerebro y la espina dorsal.
La Encefalocele se manifiesta físicamente como una protuberancia del cerebro y las membranas que lo cubren, a través de una abertura en el cráneo.
Manikandan es un adolescente de la India que nació con esa enfermedad en uno de sus modos más severos y agresivos. Él ha tenido que vivir su vida en aislamiento, ya que cargaba con una especie de péndulo colgando de su cabeza.
En la región de Kerala, donde él vive, esas anomalías están particularmente mal vistas. Lamentablemente hay personas, no necesariamente malas, que no saben de qué se trata y pueden llegar a creer cualquier cosa fuera de los términos médicos. Qué lamentable situación para ese niño.
La protuberancia había obstruido su campo visual además de deformarle todo el rostro. Sus padres, por supuesto muy preocupados, son capaces de todo por su salud. Pero lamentablemente no tenían recursos para darle la atención médica que necesitaba.
Se trata de una familia muy trabajadora y perseverante. Solicitaron al Gobierno una ayuda económica y hace poco lograron que su hijo se haga una cirugía cuyos gastos cubrió el Estado.
Un equipo calificado de 10 cirujanos especialistas en el Amrita Institute of Medical Sciences le removió la deformidad, en una operación que duró 11 horas. ¡Le dieron a ese niño una esperanza para su futuro! Después de eso, durante la recuperación, el niño estaba ansioso por regresar a casa, empezar la escuela y tener amigos.
Su padre, Selvan, quien a penas gana dinero para mantener el hogar, contó que ellos pertenecen a una tribu en Marasar y trabajan en una plantación. Él, además de tener a Manikandan, tiene otros cinco hijos que nacieron saludables.
Al principio lo que tenía era tan solo una pequeña protuberancia en la nariz, pero continuaba creciendo y todos empezaron a alarmarse. Ese niño nunca pudo ir a la escuela, o socializar… Las personas a su alrededor se burlaban de su apariencia.
«Le agradezco mucho a los doctores, desde el fondo de mi corazón, que le hayan permitido a mi hijo comenzar una vida normal», dijo Selvan. El Dr. Subramania Iyer era el líder del equipo de cirujanos, y aseguró que el procedimiento fue sumamente complejo.
La Encefalocele era tan grande que empujó el hueso de su ojo derecho hacia afuera. Tuvieron que abrirle el cráneo y aislarle la parte normal de su cerebro de la no-funcional, que estaba en el saco que colgaba de su cara.
Al retirarle la deformidad le quedó un defecto en el cráneo, entonces una porción tenía que ser reconstruida y eso representaba un reto quirúrgico muy grande. «Tuvimos que re-posicionar el ojo del paciente para remover la deformidad del ojo derecho, también le remodelamos la nariz», dijo el Dr. Iyer.
La información que manejan los medios es que en este momento Manikandan se ha recuperado de la cirugía, y está listo para que le den de alta. Ahora podrá ir a la escuela y tener una vida social como el resto de los niños de su edad.
Nos complace mucho que este niño haya recibido la ayuda que necesitaba para salir adelante, su familia debe estar muy feliz.
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