Algunas enfermedades pueden ser controladas con un tratamiento y seguimiento adecuado, pero lamentable no siempre podemos controlarlo todo y a veces suceden consecuencias fatales.
Es el caso de Lydia Macdonald, una mujer que desde pequeña fue diagnosticada con asma crónica y a sus 28 años dejó de respirar.
Es una triste partida que empaña los corazones de quienes la conocieron.
Un ser lleno de luz para su hijo, Maso Martin, quien intentó despertar a su madre varias veces para que se levantara de la cama. Mason, con 3 añitos de edad, fue hallado en su casa junto al cuerpo sin vida de su madre, quien había sufrido un fatal ataque de asma crónica 2 días antes.
Jodi-Ann, la mejor amiga de Lydia, estaba preocupada por no saber nada de su amiga desde hacía más de 48 horas. Decidió llamar a Linda Macdonald, la madre de su amiga, quien tampoco tenía información de ella ni del bebé. Sin esperar más, Jodi fue a casa de Lydia… ¡Era muy extraño no saber nada de ella!
Cuando llegó no recibió respuesta, sin embargo observó a Mason a través del cristal y le pidió que abriera. El pequeño la recibió con una frase que nunca podrá olvidar… “No puedo despertar a mami».
Jodi encontró a Lydia en su cama, donde había dado su último aliento… Había dejado de respirar con el inhalador en mano.
El pequeño Mason fue trasladado al hospital, necesitaba recibir atención médica, era evidente que estaba deshidratado. Se desconocía cómo había podido sobrevivir durante esos dos días, solo se supo que pudo comer un trozo de queso. «Nadie sabe qué sintió ni que pasó por su mente todas esas horas”.
Fue en el hospital cuando se dio a conocer la noticia sobre la muerte de esta alegre mujer. «Ella siempre fue una niña feliz y burbujeante», recuerda su madre. En su adolescencia fue hospitalizada por lo menos 5 veces al año por ataques severos de asma.
Durante el verano del año 2001, cuando tenía 14 años, Lydia sufrió un ataque tan grave que sus labios se volvieron azules. Fue llevada de emergencia al hospital durante una semana necesitó permanentemente oxígeno.
Ella era muy independiente y después de culminar la escuela, con sólo 16 años se entrenó para montar una peluquería.
Aquí tienes un video resumen de esta historia:
Un niño de 3 años estuvo varios días junto al cuerpo de su mad…
Un niño de 3 años estuvo varios días junto al cuerpo de su madre… “No puedo despertar a mami”Más Información: http://bit.ly/2nYhSzN
Publicada por Viralistas.com en Lunes, 27 de marzo de 2017
En la primavera del año 2011 conoció a Bobby Martin, quien fue el amor de su vida y padre de su hijo. Lamentablemente 2 años después falleció de manera repentina. Fue un golpe muy duro para ella… tan joven ya era viuda y con un niño de 8 meses en brazos.
«Ella sentía un profundo dolor, pero Mason le dio una razón para seguir adelante», comentó su madre.
Lydia le decía a su hijo que su padre era la estrella más brillante del cielo. Ahora este pequeño tiene 2 grandes estrellas que siempre alumbrarán su camino.
En el 2013 Lydia sufrió un fuerte ataque. Le dio tiempo a llamar a la ambulancia pero no pudo terminar la frase. Afortunadamente el servicio de emergencias llegó rápido y confirmaron que ella había dejado de respirar, pero se las arreglaron para reanimarla.
Linda comentó que su hija era muy consiente sobre su condición y siempre llevaba un inhalador. Sin embargo, su padre y ella le habían pedido que se mudara con ellos para poder estar vigilantes a cualquier otro ataque. Pero ella no quería dejar su independencia y darle el control de su vida al asma.
Será recordada como una mujer alegre, que disfrutaba la compañía de su hijo, regalando sonrisas y bailes… una mujer feliz y con mucha fortaleza.
Los padres de Lydia, después de casi 2 años de su partida, siguen cuidando a su nieto con mucho amor y así será siempre. Se preocupan porque sus días sean siempre alegres y divertidos como lo era su mamá.
En homenaje a Lydia Macdonald, sus padres han puesto en marcha una organización para crear fondos destinados a las labores relacionadas con el asma en el Reino Unido. Para obtener más información, puedes hacer clic aquí o visitar la página de Facebook.
«Esperamos que al compartir la historia de Lydia se logre salvar la vida de al menos otra persona» comenta Linda. El asma puede matar, pero a diferencia del cáncer y otras enfermedades mortales, se desconocen qué tan grave puede ser.
Es una enfermedad silenciosa que está dejando sin aliento a muchos. Un informe reciente indica que más de 2,5 millones de británicos no pueden dormir debido a un mal control de su asma. «Parece que los médicos no están tomando esto en serio», comenta Linda.
Comparte esta historia y que sirva para despertar a quienes sufren de esta enfermedad e ignoran que sus horas de sueños pueden llegar a ser eternas. Es una terrible enfermedad que debe tener un control y un tratamiento muy específico. No dejes de acudir a tu médico.