Hay trabajos más riesgosos que otros, la labor de los bomberos y policías, por ejemplo, puede ser muy peligrosa, ellos luchan por mantener a salvo la vida de los demás a pesar de que la suya esté expuesta a situaciones de alto riesgo.
Otras personas trabajan en constante contacto con sustancias químicas que podrían afectar su salud, otros pintan edificios suspendidos a muchos metros de altura.
Pero hay un oficio del que pocos hablan que es muy peligroso: el de los dobles de las películas que hacen aquellas escenas riesgosas para no exponer la integridad física de los actores que no tienen experiencia en actividades extremas.
En todas las películas de acción hay personas que se atreven a hacer las acrobacias más complicadas, entrenan durante décadas para representar a los personajes en saltos, carreras, escaladas, y un sin fin de escenas.
Una de estos profesionales del cine es Olivia Jackson, de 37 años, ella ha interpretado las escenas de acción de Milla Jovovich en la última película de Resident Evil.
También ha sido doble de riesgo de Karen Gillan en Guardians of the Galaxy, a Elizabeth Olsen en otra película de Marvel, Age of Ultron; y en la película de Mad Max: Fury Road hizo doble papel, sirviendo como doble de riesgo de Charlize Theron y de Rosie Huntington-Whiteley.
Olivia es amante de la adrenalina y su esposo, David Grant, al igual que ella, es experto en artes marciales, ambos son aficionados a acrobacias en motocicletas.
En el cine, todo está fríamente calculado porque cada segundo vale millones, literalmente y, aunque se llaman dobles de riesgo, la producción está en la responsabilidad de que ni ellos, ni ninguno en el plató, sufra un accidente. Sin embargo, los errores pueden suceder y muchas veces conducen a grandes tragedias.
Lamentablemente, en el rodaje de la última película de la saga de Resident Evil, filmada en Sudáfrica en el 2015, Olivia Jackson sufrió un grave accidente mientras se encontraba realizando una escena de persecución en una motocicleta.
El accidente ocurre debido a que un camarógrafo no salió a tiempo durante la acrobacia haciendo que su cámara golpeara el cráneo de la doble de riesgo durante la peligrosa maniobra.
El golpe ocasionó un aparatoso accidente con su motocicleta y otros artículos que estaban en el set y dejó a Jackson con varios huesos rotos, la mitad de la cara desgarrada, un hombro dislocado, un pulmón perforado y un derrame cerebral.
El primer pronóstico de los médicos no era esperanzador, pero después de 17 días en coma y ser sometida a varias operaciones, terapia y tratamientos pudo recuperarse, pero con grandes secuelas.
Ahora, Olivia tiene su médula espinal torcida, lo que le ocasiona gran dolor, y debido a ello debe usar una batería que envía señales a través de su espina dorsal para aliviar un poco el dolor.
También quedó con sus pulmones perforados, costillas rotas, el hombro quedó dislocado permanente, un pulgar cortado y su brazo izquierdo tuvo que ser amputado.
Debido a su condición física actual, no podrá seguir ejerciendo su carrera, la cual le generaba grandes ingresos al año.
Por esa razón, ella ha decidido demandar a la producción de la película por la cantidad de 2.2 millones de dólares por los daños personales que sufrió y para que así puedan ser recompensados de la mejor manera.
Esperamos que Olivia logre recuperar su estilo de vida por completo hasta que se haga justicia y que siga compartiendo su vida en las redes sociales.
Detrás de las escenas que cautivan a todos los amantes del cine se esconden realidades como esta. Ojalá que se haga justicia, comparte el testimonio de Olivia.