El Papa Francisco ha modificado una parte de la oración emblema del cristianismo: «El Padre Nuestro», después de condenar que algunas traducciones actuales dicen que Dios, y no Satanás como debería decir, lleva a los fieles a la tentación. El texto en inglés, por ejemplo, dice: “lead us not into temptation”, que traducido sería: “no nos guíes a la tentación».
En vista de que no sólo en la lengua inglesa, sino también en la italiana, existía ese error extendido, la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) adoptó en su Asamblea General del 22 de mayo una nueva versión aprobada por el Papa Francisco, que incluyen cambios en el Padre Nuestro y en el Gloria.
En el idioma italiano se decía la frase «non ci indurre in tentazione», que en español se traduciría como «no nos induzcas a la tentación», y con el nuevo cambio los fieles deberán acostumbrarse a rezar «non abbandonarci alla tentazione», es decir, «no nos abandones a la tentación».
En 2017 el Papa Francisco ya había explicado el error:
«Dios no puede inducir a los hombres a la tentación. Es Satanás quien nos lleva a la tentación, ese es su papel. En la tentación yo soy el que cae, no es Él (Dios) quien me está empujando. Un padre no hace eso, un padre te ayuda a levantarte de inmediato».
La Conferencia Episcopal francesa, por su parte, también enmendó previamente el error en 2017, con una traducción similar.
La nueva fórmula adoptada por la iglesia italiana es, por lo tanto, similar a la empleada desde hace muchos años en el castellano: «no nos dejes caer en la tentación».
Además de ese cambio, la Conferencia Episcopal italiana ha cambiado también una parte del Gloria que dice: «pace in terra agli uomini di buona volontà» (paz en la tierra a los hombres de buena voluntad) por «pace in terra agli uomini, amati dal Signore» (paz en la tierra a los hombres, amados por el Señor).
A partir de ahora las Conferencias Episcopales tendrán la facultad de elegir si se acogen al cambio y se adaptan a la traducción correcta, o no.
Sin embargo, el portavoz de la Conferencia Episcopal británica por su parte, rechazó tal modificación:
«La oración ha sido cambiada en el idioma italiano, no hay ningún plan en este momento para que cambie en inglés».
La versión en italiano quedó oficialmente cambiada a «e non abbandonarci alla tentazione,
ma liberaci dal male. Amen». Mientras que en castellano se mantiene: «no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén».
Se cree que Jesús originalmente pronunció la oración en arameo, antes de que se tradujera al griego y a otros idiomas.
Un cambio histórico para una buena porción del pueblo cristiano, justamente en el país que es la cuna del catolicismo, y que puede servir para que otras lenguas se sumen a la misma traducción. Comparte esta noticia.