Muchas personas e incluso las leyes en muchos países, tratan a los animales como si no pudieran entender o experimentar sentimientos y emociones al igual que nosotros. Este caso te demostrará que el amor incondicional de una madre no es exclusivo de la raza humana.
La mamá de este chimpancé bebé murió en un zoológico, dejando a la cría desamparada poco tiempo después de nacer. Entonces uno de los cuidadores se lo llevó a su casa para ayudarlo, pues sabía que los chimpancés bebés suelen morir después de quedar huérfanos a pesar de recibir refugio y alimentos suficientes. Muchos dicen que mueren de tristeza.
La perrita del cuidador acababa de dar a luz a una camada de tiernos cachorros, convirtiéndose entonces en una madre y hermanitos para él, en su nueva familia. ¡Nunca imaginó que su perrita se haría cargo del bebé chimpancé y lo adoptaría! Es increíble, pero las imágenes hablan por sí solas y son muy emotivas.
El bebé chimpancé se sintió cómodo inmediatamente cerca de la perrita. Se volvieron inseparables.
Le encantaba dormir a su lado, sentir el calor y la tranquilidad de una madre amorosa.
Aquí está comiendo con sus hermanitos, ¡incluso del mismo plato!
Abrazando a mamá… ¿Ves el agradecimiento y ternura en sus ojos?
Obviamente, también sus hermanos merecen cariños y abrazos.
Esta foto es muy linda. Fue tomada en el momento en el que el bebé mono estaba intentando alimentarse de su mamá adoptiva, imitando el comportamiento que había visto en sus hermanitos.
Todos lo acogieron como un miembro más en la familia.
Las fotos lo dicen todo. Una madre, sea mamá humana o mamá canina, tiene ese amor puro e incondicional hacia su hijo. No importa en absoluto si es de sangre o adoptado; el cariño lo supera todo.
No olvides compartir este vínculo tan especial con tus seres queridos 🙂