Utilizar el transporte público durante las horas de mayor congestión puede ser una verdadera tortura para muchos, más aún si hablamos de un niño autista.
Precisamente esto provocó un momento bastante incómodo para el pequeño Andrew, de 4 años, cuando viajaba con su madre en el metro de Washington DC.
La gran cantidad de persona abrumó al pequeño que se salió de control y comenzó a llorar y gritar mientras corría por la plataforma, huyendo de su mamá Taylor Pomilla. Esta situación puede sonar muy común para aquellos que tienen niños pequeños, pero más aún para los padres de niños con autismo.
En esos casos las personas creerán que se trata de un niño malcriado, cuando realmente es una situación que difícilmente el pequeño podrá controlar. Eso es quizás lo que Taylor hubiese querido explicar a las personas que la miraron de reojo durante el episodio de Andrew pero no había forma de hacerlo.
«A veces, realmente duele ver las miradas y las personas que lo señalan. Y él es tan inocente. No lo hace apropósito», dijo Taylor Pomilla.
Por fortuna, el episodio terminó cuando una especie de ángel apareció en el camino de la familia ese atareado mediodía. Se trataba del oficial de policía de Metro Transit, Dominic Case, quien se acercó para brindar algo de ayuda.
«Parecía que estaban pasando un momento difícil. Y sabes, como padre puedo identificarme con un niño de 4 años», dijo el oficial Case.
El noble hombre se acercó y pudo calmar al chico de una forma bastante sencilla: tomó su mano y parece que eso le dio mucha seguridad. Dominic saludó suavemente a Andrew para hacerlo sentir que todo estaría bien y decidió acompañarlo a él y a su madre durante todo el viaje.
Quizás, como padre pudo sensibilizarse con la escena y sentirse identificado pero, además, el oficial está capacitados para tratar con eventos como este.
Estos policías reciben entrenamiento anual sobre sensibilidad al autismo, a través de su trabajo. Por ese motivo, Dominic estaba seguro de que podía ayudar.
Después de lo sucedido, la Sra. Pomilla hizo una publicación de Facebook en la que relató la experiencia y etiquetó a algunos medios de comunicación locales, además de mencionar a la página de Facebook de la Policía del Metro de Washington y pedirles que encontraran al hombre y pudiesen darle un aumento.
«Este oficial hizo COMPLETAMENTE todo lo posible para ayudar a Andrew. Honestamente restauró mi fe en que todavía quedan buenas personas en el mundo», escribió Pomilla en su publicación.
Metro police officer holds boy with autism's hand when he's overwhelmed on train platform
When this boy with autism became overwhelmed on a train platform, his mom couldn't calm him down. While most people stared, one stranger stepped in to help, and calmed the boy by simply holding his hand ? https://cbsn.ws/2ymTICk
Publiée par The Uplift sur Jeudi 25 juillet 2019
El oficial Case le obsequió la placa con su identificación al pequeño Andrew y la madre sólo tuvo esto para ubicarlo nuevamente. Después de su publicación, Taylor y su hijo pudieron entrevistarse personalmente con el oficial Case y agradecerle por su acto tan generoso.
Como esta madre lo señaló, su fe fue restaurada con el sencillo gesto del oficial pero de mucho valor para ella y para su hijo.
Hagamos posible que más personas y especialmente oficiales vean esta noticia y el ejemplo de Dominick Case los inspire a ayudar siempre que sea necesario.