Pocas cosas son tan placenteras en la vida como presenciar las ocurrencias y payasadas de los niños. Estos ingenieros, jardineros, paleontólogos, en fin, expertos autodidactas no escatiman cuando se trata de utilizar la creatividad para resolver conflictos.
Así lo demostró el pequeño Leo cuando su auto de juguete se quedó sin baterías… Solo que difícilmente habría conseguido ponerlo a andar, pues, hasta ahora, los tampones no vienen con energía eléctrica.
Por suerte, Heather Leroux, la madre de Leo, logró fotografiar la ocurrencia de su hijo antes de que se diera por vencido en su misión. «Mi hijo acaba de encontrar unas ‘baterías’ en mi bolso», escribió Heather en la leyenda de la foto que subió a sus redes sociales, en la cual se puede ver claramente cómo su hijo intentó encender su auto con un par de tampones.
Heather, quien tiene otra bebé además de Leo y vive en Sidney, Australia, cuenta que esa mañana se encontraba preparando el desayuno al mismo tiempo que Leo jugaba en la sala. Allí el pequeño se topó con el bolso del gimnasio que ella había dejado a un lado de la puerta de entrada el día anterior.
«Su carro ‘McQueen’ no tiene baterías porque, como no tiene tapa, se las quito para prevenir que juegue con ellas», explica Heather.
«Desde hace unas semanas, le he estado diciendo a Leo que no he podido encontrar las baterías y que teníamos que ir a comprarlas», agrega la feliz mamá. Eso explica por qué, mientras ella cocinaba, escuchó un grito de emoción que venía de la sala… Era Leo diciendo «¡Mami, encontré las baterías!».
Leo abrió el estuche de maquillaje de Heather y jugó con la base hasta que dio con las anheladas «baterías».
Con el corazón en la boca por el susto, Heather salió corriendo para ver qué estaba haciendo el pequeño Leo… Y ahí estaba él, muy emocionado, mostrándole con orgullo los tampones que sacó del bolso.
«Le tuve que explicar que esas no eran baterías y que tampoco son para los autos de juguete, sino para mami», cuenta Heather, riéndose al recordar el desparpajo de su hijo. «Claro que le dije que es un niño muy astuto, pero que así no iba a conseguir encender su auto».
Bueno, Leo, al menos lo intentaste ¿No es así? ¡Esperemos que ya le hayan comprado unas baterías para su adorado auto’McQueen!
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