Lucía Vivar Hidalgo desapareció la noche del pasado 26 de julio a las 11: 20 de la noche, mientras sus padres cenaban en la terraza de un bar llamado “La Estación” adyacente a la estación de tren de Pizarra. Los vecinos y un gran equipo de funcionarios emprendieron una búsqueda exhaustiva para encontrar a la pequeña.
La Guardia Civil buscó a Lucía en círculos concéntricos de 500 metros alrededor de la estación del tren, que es una zona con campos frutales y con condiciones peligrosas. Solamente encontraron su chupete junto a la máquina expendedora de billetes.
Horas después, a las 7 de la mañana del pasado 27 de julio, un trabajador de Cercanías Renfe encontró el cuerpo de Lucía cerca de las vías del tren. Puedes recordar la noticia aquí.
El chofer den tren se percató de un bulto en las vías, inicialmente pensó que se trataba de un animal fallecido pero pudo identificar que era una niña. La Guardia Civil continuaba rastreando la zona, con el apoyo de dos perros adiestrados para búsqueda de personas que fueron enviados desde Sevilla.
Para la búsqueda de Lucía se sumaron aproximadamente 600 personas, 300 voluntarios de la población y bomberos, efectivos de la Guardia Civil, Policía Local y Protección Civil.
Los padres de Lucía estaban devastados cuando recibieron la trágica noticia de que su pequeña hija se había ido para siempre.
Desde su aparición surgieron diversas hipótesis sobre las causas de su muerte, se presume que Lucía se acurrucó en la vía del tren pero el ruido del primer tren de la mañana la despertó y al levantar su cabeza se golpeó.
El vehículo pudo pasar por encima de Lucía y aunque no la haya arrollado el golpe en su cabeza le causó la muerte.
De acuerdo a la información de algunos medios de comunicación los zapatos de Lucía presentaban desgaste, lo que puede ser un signo de que la menor caminó entre las piedras por horas.
Aproximadamente Lucía debió caminar tres kilómetros y se presume que cuando se sintió muy agotada se acostó cerca de las vías del tren. Sus familiares y vecinos le rindieron un emotivo homenaje en Alhaurín el Grande, donde Lucía vivía junto a su familia.
¿Cuál fue realmente la causa de su muerte?
Cuando encontraron el cuerpo de Lucía, las primeras hipótesis apuntaban a una muerte accidental por la apariencia del cadáver y por la inspección ocular del lugar. No había rastros de pisadas en las zonas adyacentes.
La autopsia realizada comprobó que Lucía murió a causa de un golpe seco en la cabeza que podría ser causado por el impacto de un tren. Se desconoce si la cabeza de la niña sobresalía de las vías o si ella la levantó al estremecerse por el ruido del tren.
Félix Lozano, alcalde de la cuidad, comentó que la zona donde se extravió Lucía es “muy tranquila” y que hay muy poca circulación de vehículos. Pizarra es una localidad ubicada a 33 kilómetros al noroeste de Málaga.
Los vecinos dudan que Lucía haya sido capaz de caminar una distancia tan larga siendo una niña tan pequeña. Mientras que las autoridades comentaron que la menor pudo tomar atajos para llegar a la estación con un trayecto más corto.
Algunos usuarios en las redes sociales aseguraron que es poco probable que una niña de tres años haya camino sola a un lugar tan oscuro porque debería sentir miedo. Los más pequeños buscan estímulos y en el lugar donde apareció Lucía para mayoría de los niños de su edad sería muy aburrido.
Muchos dudan que un tren de cientos de toneladas logre impactar contra la cabeza de una niña de tres años a una velocidad de 100 kilómetros por hora y que solo le produzca un golpe en la cabeza.
También, aseguran que es necesario examinar la parte posterior del tren que pudiera estar implicado para comprobar la existencia de restos de sangre.
Entre llanto y flores blancas, una multitud acompañó a los familiares de Lucía para darle el último adiós. ¡Descansa en paz princesa! Compartamos nuestras condolencias.