Es de conocimiento generalizado que la vocación de maestro es una de las más desgastantes que existen; pero al mismo tiempo, una de las más gratificantes. Independientemente de la edad de los alumnos, siempre un buen profesor tendrá la suficiente autoridad moral para imprimir en el corazón de sus estudiantes un sello indeleble, que ni los propios padres serían capaces, básicamente porque el tiempo que comparte un educador con sus alumnos -especialmente en la etapa escolar-, puede llegar a ser mayor que el que pasan en sus hogares.
Todos recordamos con cariño esos profesores de nuestra infancia, a quienes les debemos una buena ortografía, un especial gusto por una determinada materia, o simplemente aquella maestra que nos sonreía y ya con eso era bastante.
Pues el “Profe Ramón” es uno de esos que seguramente sus alumnos recordarán para siempre, uno de aquellos maestros, más bien educadores, que dejan huella… y para bien.
Ramón Rodríguez, profesor de Colegio y Universidad en Sevilla, España, además de ser preparador de docentes, ha hecho historia con su reciente y muy peculiar publicación en su cuenta de Twitter,sobre el modo en que evalúa a sus alumnos de 9 años. Y la resonancia entre sus seguidores ha sido inmediata.
El profesor y coordinador TIC, en Maristas de Sevilla, publicó un mensaje sobre el rendimiento de una alumna suya de 9 años, Elena, que en el medio no estamos acostumbrados a escuchar, y ha causado gran admiración.
Suele suceder que la llegada de las calificaciones a casa podría ser un momento de angustia para los alumnos, especialmente porque saben que después puede venir un premio o no, y porque muchas veces los pequeños no quieren decepcionar a sus padres.
Pero este buen hombre ha sabido dar con el asunto en el clavo, rescatando el valor que tiene un alumno, no por las notas que puede obtener -que a la final son un número-, sino en cuanto representa un valioso aporte como persona al grupo, y ha publicado el siguiente mensaje:
«Ayer, inevitable día de notas, decidí entregarles las «otras notas», que sin duda son las importantes de verdad», es el mensaje que el Profe Ramón publicó en Twitter.