En México ocurrió un sismo de 8,2 grados, se trata de la escala más grande que se haya registrado en los último 100 años. El epicentro tuvo lugar en el océano Pacífico, muy cerca de las costas de Chiapas y Oaxaca, aún así, el sismo logró sentirse en la capital; Ciudad de México.
El sismo ocurrió en la noche, por lo cual mucha gente estaba desprevenida, aún así muchos lograron salir de sus hogares para ir a puntos de reunión seguros, lejos de edificios, entre otros. Mientras las personas esperaban a que el temblor acabara, fueron testigos de un extraño fenómeno que ocurría en el cielo, al mismo tiempo que el sismo.
En las redes sociales comenzaron a circular muchos videos desde distintos puntos de la Ciudad de México en los que se podían observar claramente unos destellos en el cielo, pequeñas luces que se encendían sin una razón aparente.
Comentaron que parecía como si fueran relámpagos o truenos, pero no se trataba de ninguna tormenta, y el hecho de que ocurriera durante el sismo, llenó a todas las personas de incertidumbre, no podían parar de cuestionarse: ¿Qué eran esas luces extrañas en el cielo?
Por todos lados comenzaron a surgir teorías sobre las luces, pero la verdadera causa de esas luces es más sencilla de lo que muchos piensan.
Según National Geographic, los científicos en 2014 escribieron un artículo que sugiere que tales luces fueron causadas por las propiedades eléctricas de ciertas rocas.
Según Friedemann Freund, profesor adjunto de física en la Universidad Estatal de San José y investigador principal en el Centro de Investigación Ames de la NASA, las luces pueden tomar a veces «muchas formas, formas y colores diferentes».
Las rocas conocidas como: Basalts y gabbros son las principales causantes de dicho fenómeno ya que tienen pequeños defectos en sus cristales y cuando una onda sísmica golpea, las cargas eléctricas pueden ser liberadas.
Estas rocas están presentes en las estructuras verticales subterráneas gigantes en algunas áreas, con los «diques» que encadenan cargas, los científicos agregaron: «Las cargas pueden combinar y formar una clase de estado del plasma, que puede viajar a velocidades muy altas y estallar en la superficie para hacer descargas eléctricas en el aire creando los espectaculares programas de luces«.
«Un terremoto se provoca por la ruptura de una falla, tras acumularse tensión tectónica en la zona. La fricción de las rocas puede generar en su superficie corrientes eléctricas por el flujo de iones que genera«, comenta Emilio Carreño, director del Instituto Geográfico Nacional de España (IGN).
«Las luces de terremotos no solo ocurren durante el movimiento de la tierra. También se han registrado antes y después del mismo«, apunta el experto en sismología.
¡Las escenas son impresionantes!
La naturaleza puede ser complicada de entender, aunque existe una explicación lógica para este tipo de luces tan misteriosas. Pero hay personas que han aprovechado la situación actual (huracanes, temblores, tormentas tropicales) para especular y causar miedo alarmando a la población.
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