El género está determinado por varios factores, el más importante es la información en el cerebro o género mental. Las transiciones de género hacen énfasis en cambiar el cuerpo para que se alinee con la mente, porque la información en el cerebro no cambia. La identidad de género es innata.
Miles de niños y niñas tienen padres y madres transgénero. Este término describe a las personas cuyo sentido interno de ser hombre o mujer, es diferente del género asignado por el médico al nacer.
Un hombre transgénero de nombre Freddy McConnell ha perdido la batalla ante la Corte Suprema, para ser llamado “Padre” en el certificado de nacimiento de su hijo Jack. Quedó embarazado en 2018, y estaba legalmente registrado como hombre en ese momento.
Este personaje, oriundo de Kent, Inglaterra, ya se había sometido a una cirugía superior antes del embarazo y había estado consumiendo testosterona desde 2014. Su historia fue filmada y narrada a través de un documental de la BBC de Londres llamado Seahorse: The Dad Who Gave Birth.
La antes mujer, de 33 años, pudo concebir en el segundo intento de usar un donante de esperma y dio a luz de forma natural. Al dejar la testosterona para concebir, descubrió que su vello facial desapareció, sus caderas se ensancharon y comenzó a hablar más agudo.
Freddy llevó su caso a la división de familia del Tribunal Superior el año pasado, argumentando que ser nombrado como la madre del niño va en contra de su derecho humano al respeto de género y a su vida privada y familiar.
Sin embargo, Andrew McFarlane, el juez de la causa, dictaminó que, según el Derecho inglés, la definición de madre se refiere a estar embarazada y dar a luz, independientemente de si esa persona es mujer u hombre.
“Existe una diferencia material entre el género de una persona y su condición de padre”, aseguró el jurista.
A principios de este año, tres jueces de la Corte de Apelaciones desestimaron el caso de Freddy, argumentando que involucraba una legislación compleja y que, por lo tanto, cualquier reforma tendría que dirimirse tras las puertas del parlamento.
Freddy no ha logrado persuadir a los jueces de la Corte Suprema de que escuchen este caso. Según ha dicho un portavoz, incluso se le ha negado impugnarlo ante la Corte Suprema de Justicia.
Esto ha encendido las alarmas de la organización benéfica LGBTQ + Stonewall, que ha descrito la decisión de los jueces de la Corte Suprema como un revés en el avance por la igualdad.
“Todos los padres, incluidos los padres LGBT, merecen ser reconocidos por lo que son y es increíblemente frustrante que la Corte Suprema haya perdido la oportunidad de progresar en la igualdad”, dijo la directora ejecutiva de Stonewall, Nancy Kelley.
La identidad no es un lujo. Al igual que cualquier otro padre, las personas transgénero deben poder hacer que su relación con su hijo se reconozca en los certificados de nacimiento con normalidad.
Ojalá que, tanto Freddy como cualquier padre o madre puedan llegar a ser finalmente reconocidos realmente por quienes son. Comparte esta historia con tus familiares y amigos.