Para nadie es un secreto que las madres se destacan por hacer malabarismo entre sus hijos, los trabajos domésticos y hasta las responsabilidades de su profesión. Por eso no es de extrañar, ver a una mujer hacer las compras, cocinar, limpiar u otras actividades con su hijo en brazos.
Alguien que sabe en carne propia a que nos referimos es Rachael Brindley, una madre de tres hijos que se llevó el susto de su vida cuando un oficial de policía se detuvo al verla manejando una peligrosa maquinaria con su hijo en brazos.
Esta mujer llevaba días pidiendo a su esposo, Ryan, que cortara el césped del jardín delantero pero este se encontraba ocupado en otro proyecto y nunca parecía tener tiempo para hacerlo. Por ese motivo, la voluntariosa mujer decidió ponerse los guantes y hacerlo por su cuenta.
«Era un buen día, así que pensé que podría ayudar a mi esposo y cortar el césped yo misma. Me gusta cortar la hierba», dijo Rachael.
El jardín de Rachael y Ryan necesitaba un corte y, de cierto modo las mujeres tendemos a ser bastante decididas. Rachel buscó la máquina y un canguro, con el cual colgó a su pequeño bebé.
La mujer se aseguró de que el niño quedara mirando hacia el frente, de modo que no se fastidiara mientras trabajaban y poder terminar la tarea sin complicaciones.
Al parecer todo marchaba bien, un poco de trabajo no era nada nuevo para la mujer. Pero su corazón se detuvo cuando vio a un oficial de policía que la observaba fijamente mientras conducía la patrulla y finalmente aparcó el auto en la acera contigua a su casa.
El corazón de Rachel se aceleró, no podía dejar de preguntarse qué había hecho mal. Para ella sólo estaba cortando el césped de su casa con su hijo, nada extraordinario para la mujer. Pero la verdad es que sí era algo realmente extraordinario ante los ojos del agente.
El oficial se acercó amablemente a Rachel pero no para arrestarla, sino para ofrecerle un poco de ayuda. Los nervios de la mujer fueron completamente infundados y, por curioso que parezca, el uniformado sólo deseaba colaborar con la atareada madre.
«Todos pensaron que estaba a punto de meterme en problemas o algo así… ¡Este dulce sheriff se detuvo e insistió en cortar mi jardín por mí!», escribió la Sra. Brindley.
Después del grato incidente, la mujer fue a su Facebook y relató lo sucedido en una publicación que se hizo viral. Su esposo también se sintió conmovido por el gesto del oficial y decidió compartir un agradecimiento público para el solidario hombre.
«Fue una gran ayuda para mi esposa hoy ¡Gracias!», escribió Ryan.
Aunque el nombre del amable uniformado es aún un misterio, su acción no ha podido pasar desapercibida y más de uno se siente halagado y a su vez impresionado por el gesto de este funcionario público.
Sin duda alguna, este oficial es de esos que todos desean tener en su comunidad, siempre listo para prestar todo tipo de ayuda a quien lo necesite.
Comparte esta noticia y multiplica el ejemplo de este fiel servidor, todos los días tenemos la oportunidad de hacer buenas acciones.