Siempre actúa con el corazón, con alegría y sin esperar nada a cambio, pues te aseguro que el universo te recompensará por tus buenas acciones cuando menos lo esperes, incluso cuando el tiempo haya transcurrido.
Esto fue lo que vivió un buen hombre nigeriano, llamado Nwoke Agulu, quien siempre se mostró solidario con uno de sus amigos de la escuela cuando eran niños, debido a que él no podía costear el autobús escolar. Afortunadamente, el tiempo pasó y ese buen amigo pudo cambiar su vida.
Con el tiempo, quedaron atrás todas las carencias y malos momentos que debió pasar su amigo. Terminó su formación académica y la prosperidad y la abundancia llegaron a su vida, ahora él podía ayudar a los demás y retribuir la ayuda recibida.
Continuaron siendo buenos amigos
Si bien Nwoke nunca esperó recibir algo a cambio por sus buenas acciones, quedó impactado cuando recibió en su teléfono la alerta de una transferencia bancaria por la sorprendente cantidad de 50 mil dólares.
Nwoke sabía quien era el remitente de la misteriosa transferencia, su mismo amigo de la infancia, pero no entendía ¿por qué estaba recibiendo ese dinero? Así que decidió preguntarle cuál era el motivo o para qué se suponía que debía utilizarlo.
Cuando su amigo le reveló porqué había hecho ese envío de dinero, Nwoke se quedó sin palabras. Se debía a todos los años que el entonces amigo necesitado recibió su ayuda para poder transportarse en el autobús escolar.
Impactado por el gesto, Nwoke decidió compartir su inusual experiencia en las redes sociales, sin esperar que su historia se haría viral, tocando los corazones de miles de internautas de todo el mundo.
“Mi amigo de la escuela secundaria me envió 50 mil dólares. Le pregunté para qué, él respondió y me dijo: ‘gracias por llevarme en el autobús de ida y vuelta a la escuela, durante 6 años’”, escribió Nwoke.
Muchos internautas reaccionaron a la publicación del hombre, coincidiendo en que siempre es bueno ayudar a los demás y ser solidarios con los más necesitados. Independientemente de si existirá una recompensa o no.
Y es que son muchas las personas que pasan por una mala situación en la actualidad y también han sido bendecidos encontrando gente de buen corazón, dispuestos a ayudarles a hacer más llevaderas sus dificultades.
Apenas vemos a la gente así, aprendamos a recordar las buenas acciones que la gente hace por nosotros, para ofrecernos su apoyo.
“Rezo para que Dios me bendiga más porque tengo mucha gente a quien mostrar agradecimiento, especialmente a una pareja que me alimentó durante mis días en la universidad, qué dios les llene de muchas bendiciones”, comentó un internauta.
Todos podemos ayudar a alguien más, en mayor o menor medida, nunca dudes en brindar una mano amiga y en agradecer si eres tú quien fuiste auxiliado.
Si más personas se unen para ayudar, el mundo será cada vez mejor. Comparte esta emotiva historia que nos recuerda el valor de la solidaridad y que un pequeño gesto puede hacer una gran diferencia.