Perder a un ser querido siempre es algo difícil de entender y asimilar en el corazón. En ocasiones, transcurren solo pequeños instantes entre un momento de alegría y una gran pérdida.
Tal como sucedió con un joven de solo 19 años que intercambió mensajes con sus amigos, momentos antes de perder la vida por el coronavirus.
El joven Paulo Henrique de Oliveira Silva se escribía constantemente con amigos desde su teléfono, poco antes de fallecer por complicaciones del COVID-19, el 10 de septiembre, en Jundiaí, Brasil. Sus seres queridos lo describen como un chico sonriente y alegre que contagiaba su energía a su alrededor.
«Fue la alegría de todo», dijo un amigo sobre Paulo Henrique.
Habló sobre la habitación en la que permanecía aislado mientras se recuperaba del coronavirus.
El diagnóstico positivo de la enfermedad llegó cuatro días después de la triste muerte. El cuerpo de Paulo Henrique fue sepultado en el Cementerio Municipal de Nossa Senhora do Montenegro, el día 11, también en la ciudad.
No hubo tiempo para despedirse de familiares y amigos, ya que no se permite hacer un funeral en casos de coronavirus sospechosos o confirmados, por lo que de recuerdo sus amigos solo conservan sus últimos mensajes.
Su amigo le dijo que se recuperara bien, él respondió «Sí hermano», con la promesa de que se verían en una semana.
«El mismo día, intercambié una idea con él en su teléfono y dejó de responder alrededor de las 2:50 pm. Cuando me enteré, casi me desmayo en la calle», señaló un amigo llamado Vinícius.
Wesley Soares Santos, de 17 años, también habló con Paulo Henrique el día antes de su muerte. Le pareció extraño que su amigo desapareciera en las redes sociales y decidió llamarlo.
«Él siempre se preocupó por mí y trató de llevarme a Jesús. No era solo un amigo, era mi hermano. También era un padre, porque veía en mí a un niño al que había que reprender y guiar», dijo Wesley.
Vinicius dos Santos Silva decidió hacerse un tatuaje en la mano en honor a su amigo. Por casualidad o coincidencia, el día 11 también fue el cumpleaños de Vinícius.
Ambos fueron mejores amigos durante más de cuatro años y solían celebrar sus cumpleaños juntos, ya que solo son dos días los que separan una fecha de otra.
Paulo cumpliría 20 años el 13 de septiembre
El número 11 también despierta un recuerdo especial en Wesley, a causa de un sobrenombre que el joven tenía entre sus compañeros futbolistas cuando vestía la camiseta de ese número. Además de los objetos, la música también impactó a los jóvenes durante su relación con Paulo Henrique, ya que esta era una de sus mayores pasiones. Los tres tocaron instrumentos en la iglesia.
Sobre todo, estos jóvenes nunca olvidarán el gran mensaje que su amigo dio al mundo: ayudar siempre, por lo que honrarán su memoria haciendo el bien a los demás.
“Una cosa que siempre me decía era ayudar a la gente. Creo que ese fue su legado. No todos somos fuertes, tenemos nuestros momentos de debilidad. El mañana es de Dios”, concluye Vinícius.
Nunca se sabe cuándo perderemos a un ser querido. Por eso, nunca te alejes de las personas que te aman y no dudes en demostrarles lo mucho que significan para ti.
No te vayas sin compartir esta emotiva historia y recuerda la importancia de la amistad.