Muchas veces no nos damos cuenta de lo afortunados que somos al contar con la presencia de nuestros familiares y seres queridos. Alison Wright es una mujer que pasó gran parte de su infancia en la casa de sus abuelos. Cuando era pequeña, no estaba realmente consciente de que podían partir en cualquier momento.
Alison vive en el estado de Tennessee en los Estados Unidos.
Ahora, años después, se dedica a recordarlos y sus palabras han inspirado a miles de personas para valorar a quienes nos brindan amor incondicional. Los abuelos de Alison compartieron una vida llena de altibajos.
Tenían una granja y su esperanza era que este fuese su sustento durante muchos años, pero perdieron la propiedad y tuvieron que mudarse para buscar nuevas oportunidades.
Los abuelos de Alison se casaron en 1942 en una fecha muy especial, el día de San Valentín.
El abuelo comenzó a trabajar en estaciones de servicio, pero su estado de salud comenzó a hacer que su vida fuese cada vez más difícil y dolorosa: sufrió un derrame cerebral.
Desde entonces, nada fue lo mismo. Alison todavía era una niña y no comprendía la dura situación que enfrentaba su abuelo, comenzó a tenerle miedo y a evitar estar a su lado.
«Fui una niña tonta y no lo aprecié”.
Su abuela, mientras tanto, tomó las riendas de la casa. A lo largo de los años trabajó en diferentes locales como KFC y Walmart y se aseguró de que nada le faltara a su esposo. Compartieron una casa llena de colores y alegría en donde cada vez recibían menos la visita de su nieta.
Era tradición que Alison pasara todos los sábados con sus abuelos, pero con el paso del tiempo prefirió salir con sus amigos.
Cuando su abuelo perdió la vida, quedó en shock. Realmente no tenía idea de que algo así podía suceder y decidió que debía compartir un poco más con su abuela. Gracias a esos lindos momentos, comenzó a recordar lo mucho que la querían.
Realmente le habían dado tanto amor que ahora desearía poder haber actuado de una manera diferente cuando era pequeña.
“Ellos me amaron incondicionalmente. En todos mis 41 años creo que han sido las únicas personas que realmente lo hicieron”.
Poco después, la abuela de Alison también perdió la vida. Ahora, ella aprovecha cada instante que pueda para recordarles y revivir todo el amor que le brindaron. Espera que su mensaje llegue al mundo entero para ayudar a que otras personas valoren al máximo a quienes tienen a su alrededor.
Nunca es tarde para decirle a alguien lo mucho que le queremos, hay que valorar cada segundo la presencia de las personas que amamos. Comparte este inspirador mensaje.