Hay historias que impactan nuestra vida de verdad porque son una muestra de la valentía y el coraje con el que algunos enfrentan los peores momentos, pero si quien lo demuestra es un bebé, entonces no puedes sino admitir que se trata de algo extraordinario.
Reggie Aslin nació en Leeds, Inglaterra, cuando faltaban 20 semanas para su nacimiento, le diagnosticaron una enfermedad muy rara, conocida como: Síndrome del corazón izquierdo hipoplásico (HLHS).
Esta enfermedad se caracteriza porque el corazón no se ha formado por completo es incapaz de proporcionar el suficiente flujo sanguíneo a todo el cuerpo. La situación era de lo más preocupante para Reggie y su familia.
Los médicos le informaron a la familia de Reggie que debían someter al pequeño a una cirugía de corazón abierto, dicha intervención médica era de alto riesgo y cabía la posibilidad de que Reggie no la soportara.
Pero lo más trágico para la familia fue que incluso si Reggie lograba sobrevivir a la cirugía, no sería capaz de de vivir más allá de la adolescencia. La cirugía solo le daría la oportunidad de vivir con su familia algunos años.
Sus padres, Lee y Michel Alsin de 35 y 34 años respectivamente, habían intentado tener un hijo por más de 6 años. La noticia que les dieron los médicos fue devastadora para ellos, con tan solo 20 semanas de embarazo los médicos detectaron la enfermedad de Reggie y tuvieron que informarle a su familia que solo tendría el 50% de posibilidades de sobrevivir.
Los padres nunca pensaron en el aborto, sino que decidieron luchar por él y aceptarlo aún con esa enfermedad. Sabían que después de tantos años de haberlo intentado, no se rendirían ahora y tratarían de darle la mejor atención médica posible a Reggie.
Reggie logró nacer mediante una cesárea el 01 de septiembre de 2016. A los 4 días de su nacimiento fue sometido a un tratamiento de tres pasos, el primero se trataba de una cirugía a corazón abierto, con la cual conseguirían que el lado derecho del corazón ayudara al lado izquierdo a cumplir sus funciones.
Los médicos tuvieron que restablecer el ventrículo derecho para que bombeara la sangre oxigenada (roja) a todo el cuerpo, y la sangre no oxigenada (azul) llegara directamente a sus pulmones.
Los padres de Reggie sabían que solo un 60% de pacientes que son sometidos a esta cirugía logran sobrevivir. Pero no por ello dejaron de intentarlo. Él merecía que le dieran esa oportunidad.
La operación duró cerca de 9 horas, fue muy complicada, y durante todo ese tiempo la familia de Reggie estaba preocupada por su futuro, con el alma en vilo.
«La primera operación es siempre la más peligrosa porque es la más larga y compleja, representa el mayor obstáculo. Dijo el médico «Él es sin duda un luchador»
Reggie logró superar el tratamiento en sus tres fases, se mostró siempre muy valiente a pesar de su corta edad. A las seis semanas de vida le permitieron ir a casa con su familia, pues ya estaba en mejores condiciones.
Para sus padres era un milagro tenerlo con vida
Este pequeño valiente nos enseñó a no perder la esperanza
Su hermana mayor, Katelyn de 13 años, acompañó a su hermano pequeño en todo momento y se mostró muy emocionada de poder tenerlo en casa para celebrar con él la Navidad.
«Significa mucho para nosotros tenerlo aquí en casa, sin importar el tiempo que esto sea posible, unos meses, años o más allá de 10 años, solo estamos felices de que esté con vida ahora» Dijo Michelle.
¡Es hermoso!
«Vamos a darle tanto amor y buenos momentos como podamos. Él va a tener la mejor vida que se pueda tener», dijo su madre.
Ahora Reggie crece con una sonrisa en el rostro que motiva a toda su familia a darle lo mejor.
¡Qué grandioso final feliz!
«Esperamos que en unos 19 o 20 años exista otra opción que le permita vivir por más tiempo»
Es un bebé que merece tener una buena vida, se lo ha ganado al aferrarse con todas sus fuerzas a quedarse con su familia. Cada día va creciendo más y se le ve sonriente y feliz, esa ya es una batalla más que ha logrado ganar. Esperemos que Reggie encuentre un tratamiento que le permita vivir por muchísimos años más.
Comparte esta historia tan inspiradora y emotiva con todos tus seres queridos.