En los últimos días, a través de las redes sociales se ha difundido una noticia alarmante: una misteriosa ‘nube’ radioactiva originada en la ex central nuclear de Chernobyl, Rusia, que explotó en 1989, se desplaza rápidamente por toda Europa, llegando incluso a tocar algunos países del Caribe. Pareciera que las teorías sobre el fin del mundo, cobran fuerza.
El hecho ha sido observado por diversas autoridades de los países nórdicos, quienes han advertido el aumento de niveles de radioactividad en el Norte del Viejo Continente. Como se recordará, la explosión nuclear ocurrida hace ya 31 años fue la emisión más seria de material radioactivo desde el accidente en la central nuclear japonesa de Fukushima, en 2011.
En septiembre de 2017 una nube ligeramente radioactiva se desplazó a lo largo de gran parte de Europa, aunque su existencia no fue divulgada en la prensa.
Ningún gobierno se responsabilizó en su momento del hecho, pero un nuevo estudio llevado a cabo por cerca de 70 científicos de distintos países aseguran tener la respuesta sobre el origen del incidente.
Los especialistas basan su explicación en más de 1.300 mediciones de diferentes puntos de Europa. ¿Su conclusión? el origen de la nube no fue un accidente en un reactor, sino en una planta de reprocesamiento de combustible nuclear ubicada en territorio ruso.
Sin embargo, distintos voceros del gobierno fueron contundentes al negar en diversas ocasiones que una de sus plantas fuera el origen de la nube. Tampoco han hecho pública ninguna reacción oficial tras la publicación del nuevo estudio.
“Los datos indican una liberación desde una instalación de reprocesamiento nuclear en el sur de los Urales, posiblemente el complejo nuclear Mayak”, señala el estudio publicado en la revista de la Academia de Ciencias de Estados Unidos, Proceedings of the American Academy of Sciences (PNAS).
A pesar de que ha sido detectada la presencia de rutenio 106 radioactivo, las mediciones indican que los niveles de radiación son bajos y no representan un riesgo para la salud de los europeos.