Algunas personas crecen con numerosas inseguridades y mientras transcurre el tiempo se van llenando de miedos. Hablar en público suele ser uno de los temores más comunes tanto en chicos como grandes, pero la edad no importa para dar grandes lecciones y ejemplos de vida.
Así lo ha demostrado un estudiante de cuarto grado que decidió pararse delante de sus amigos y hablar sobre el espectro que padece.
Lejos de sentir vergüenza, el pequeño de 11 años habla con soltura y confiesa a sus amigos su espectro autista, aunque ninguno de ellos lo sospechara con anterioridad.
“Durante mucho tiempo, ustedes no se han enterado que yo tengo autismo”, dijo el pequeño al inicio de su discurso.
Rumari Zalez, un estudiante de cuarto grado en Eagle Canyon Elementary en Chino Hills, California, decidió pedir un minuto de atención a sus compañeros y maestra para darles una información importante: hablarles sobre el autismo.
El heroico acto del pequeño lo realizó el 5 de abril, mes de la concientización sobre el espectro autista.
Para Rumari esta fue una lección de honor para sus compañeros, en nombre de todas las personas que como él se ubican dentro de este espectro.
Sin embargo, la enseñanza que Rumari había pensado solo para su salón de clases ha conmovido y llegado al corazón de más de una persona en el mundo. Lisa Rachel Moe, maestra del niño, no pudo contenerse y capturó en vídeo el emotivo momento en que el Rumari explicaba su condición.
«No estaba preparado que yo capturara el momento. Pero ver su confianza para levantarse y hacer eso… ha consolidado mi propósito de ser profesora y crear ese entorno para decir sin disculpas: ‘Me guste o no, este soy yo'», dijo la orgullosa docente.
Moe lo publicó el vídeo en su Facebook y obtuvo más de 13.000 visitas. Muchas personas agradecieron a la joven por su labor como docente y por compartir el emotivo vídeo.
“Me encanta Rumari. Tuve el placer de trabajar con él el año pasado en su aula. Estaba tan orgulloso de él y de cómo acepta a los otros estudiantes. Él es un chico increíble y hará grandes cosas!!”, comentó Wendy Nichols Kowalski.
Durante su discurso, el niño explicó que por su espectro tendía a hacer algunos ruidos que lo hacen sentir bien. Además, les brindó a sus amigos la oportunidad de intervenir al final del discurso para que pudieran hacerle cualquier pregunta.
Sin embargo, no hubo mayor interrogatorio, sus amigos simplemente lo aplaudieron y comenzaron a abrazarlo. Todos estaban orgullosos y complacidos por la amistad que les brinda Rumari.
«No importa lo que haga una persona o si puede parecer extraño o si a veces hace ruidos extraños… son buenos tal como son, como tú, Rumari. Esto no es una pregunta, pero creo que eres increíble tal como eres» dijo uno de los niños.
La madre de Rumari, Olivia Dasso, descubrió que su niño estaba en el espectro autista cuando el chico tenía 3 años. Ella y su esposo decidieron no revelarlo al joven sino que él lo fuese descubriendo porque no querían condicionar de ningún modo su crecimiento.
«No queríamos que fuera una excusa, una barrera o un límite para él. Pensamos que si surgía, tendríamos la charla, y surgió», dijo Dasso.
Hace unos meses, llegó la inevitable conversación. Rumari estaba viendo el tráiler de la película de 1988, «Rain Man», en la cual participa un personaje autista y pudo identificarse con él. De este modo, Rumari descubrió y abrazó su condición.
«Eres único como él y tienes un superpoder. Eso es algo que pocos tienen», dijo Rumari.
La autenticidad y aceptación de las diferencias se ha convertido en un poderoso mensaje que Rumari decidió compartir con sus compañeros. El niño reunió el coraje y la valentía para aceptarse con total libertad y comunicarles su espectro a sus amigos, quienes amablemente solo pudieron correr a abrazarlo al final de su speech.
Este pequeño valiente y entusiasta merece que su historia sea dada a conocer. Comparte esta nota y haz posible que su poderoso mensaje llegue a más y más personas.