Ryan es un niño de 7 años que protagoniza el contenido de un canal de YouTube llamado “ToysReview”, según Forbes es el canal que generó 22 millones de dólares en ingresos el pasado año.
Hace dos años estaba en la posición número 8 y ahora logró escalar al primer lugar.
El menor era fanático de los vídeos compartidos en YouTube en los que otros niños presentaran juguetes a sus seguidores, un día le preguntó a su papá que si podía hacer él mismo sus propios vídeos mostrando sus juguetes.
Así comenzó su exitosa trayectoria, ahora es la celebridad de YouTube con mayores ingresos del mundo.
La familia de Ryan administra el canal de YouTube desde marzo de 2015, su progreso era muy lento hasta que uno de los vídeos que publicaron en julio de 2015 se hizo viral, en las escenas aparecía Ryan abriendo una caja que contenía más de 100 juguetes de la serie “Cars”, de Pixar.
Ese alcanzó aproximadamente 935 millones de visitas, y desde entonces fue adquiriendo más seguidores.
En el canal, comparten vídeos en los que el niño abre juguetes nuevos para señalar sus características mientras juega, además, también prueba alimentos infantiles.
Muchas marcas han usado su contenido como herramienta para hacer publicidad de sus productos ya que millones de niños y sus padres ven los vídeos compartidos en el canal.
En el primer trimestre de este año los padres de Ryan firmaron un acuerdo con Walmart, la reconocida tienda de departamentos de Estados Unidos, para vender su propia línea de juguetes «Ryan’s World» que se pueden adquirir en más de 2.500 tiendas de Estados Unidos.
El canal de Ryan tiene 17 millones de seguidores y ha alcanzado 26 mil millones de visitas.
La madre de Ryan, quien ha querido mantener su identidad en el anonimato, abandonó su trabajo como maestra de química en una escuela secundaria para dedicarse al canal de YouTube a tiempo completo.
Este tipo de canales de YouTube les ofrecen a las marcas la oportunidad de llegar a cientos de espectadores a diario, Ryan es el anfitrión de los vídeos que reseña los juguetes que abre con comentarios espontáneos con los que cualquier niño se podría identificar despertando su interés en tener el mismo juego.
Además, los niños son seguidores que muy probablemente verán el contenido de un vídeo completo porque se sienten realmente atraídos por las escenas, mientras que el público adulto suele interrumpir la reproducción antes de que culmine. YouTube toma en cuenta este parámetro en la monetización de los vídeos de su canal.
El hecho que un niño de 7 años tenga el compromiso de satisfacer las necesidades de sus seguidores y cumplir con los acuerdos publicitarios establecidos con las marcas que patrocinan su contenido ha causado polémica.
Algunas personas alegan que no debería estar “trabajando” a su corta edad aunque parezca que se divierte jugando mientras sus padres lo graban. Pero de acuerdo con la Comisión de la Fuerza Laboral de Texas, en Estados Unidos, cuando una empresa es propiedad de un padre o custodio legal, estos pueden emplear a sus hijos sin importar su edad, siempre y cuando el trabajo no ponga en riesgo su vida y lo haga bajo la supervisión de los adultos.
Los padres de Ryan aseguran que procuran que la grabación de los vídeos que publican diariamente no interfiera en la vida del niño ni en sus estudios. Los suelen grabar los fines de semana y los editan mientras él está en la escuela.
“En este momento le encanta grabar vídeos, cuando le digo que vamos a filmar él se emociona. Mientras lo ame y no interrumpa su rutina diaria, planeamos continuar. Pero en el momento en el que ya no se esté divirtiendo es el momento de parar”, dijo la madre.
Es una situación que ha generado un debate en las redes, el estilo de vida de Ryan no puede ser el de un niño normal al recibir tanta cantidad de juguetes y ser grabado de forma permanente.
Los padres de Ryan aseguran que la mayoría de los juguetes usados en los vídeos son donados a organizaciones benéficas. Comparte este caso y déjanos saber tu opinión.