Desde finales del año pasado, el coronavirus ha causado enormes cambios en nuestra sociedad.
Es una situación verdaderamente difícil pero ha logrado crear conciencia sobre el importante rol que cumplen algunos trabajadores como aquellos que se dedican al sector de salud así como también otros pequeños héroes que suelen pasar desapercibidos.
Ya se han confirmado más de tres millones de casos positivos de coronavirus en todo el mundo.
Los recolectores del aseo, los repartidores de comida, los conserjes y aquellos que limpian los hospitales son personas que se encuentran en la primera línea de esta ardua batalla.
Ellie MacDonald es una joven que se encuentra muy orgullosa de trabajar en la limpieza de un hospital.
Ellie apenas tiene 19 años de edad.
Normalmente, se trata de un empleo al que Ellie le dedica los fines de semana ya que se encuentra estudiando periodismo en la Universidad de Salford.
Sin embargo, sus clases se detuvieron para cumplir con la cuarentena y Ellie tomó la decisión de brindar todo su apoyo al hospital. Ahora está haciendo jornadas de tiempo completo.
“El hospital estaría sucio sin nosotros. Es posible que no estemos capacitados para primeros auxilios pero creo que salvamos vidas de otra manera”, aseguró la joven.
Su trabajo es Asistente de Limpieza en el área de Accidentes y Emergencias. Se trata de una de las zonas más concurridas en el hospital y allí el aseo resulta vital para evitar que el coronavirus se propague de un paciente a otro.
“Desde que comenzó la pandemia siento que la gente valora mucho más nuestro trabajo. Sentimos que tenemos voz y que la gente nos apoya”, celebró Ellie.
El COVID-19 se puede propagar muy fácil de modo que hay que desinfectar y limpiar correctamente todo aquello con lo que un paciente infectado haya tenido contacto. De lo contrario, la curva de contagios puede salirse aún más de control.
“Si no limpio el cubículo que acaba de recibir a un paciente con coronavirus, la siguiente persona podría obtenerlo. Hay que actuar rápidamente”, explicó Ellie.
Al igual que los médicos, el personal de limpieza del hospital se encuentra bajo un enorme riesgo de contraer la enfermedad y transmitirla hasta sus familiares.
Es por eso que Ellie toma todas las medidas de seguridad posibles pero sigue decidida a aportar su granito de arena en medio de esta difícil crisis de salud. Es necesario que ella y todos sus colegas reciban el mérito por su sacrificio. Sin ellos, muchas personas perderían la vida.
Agradecemos a Ellie y a todos aquellos que participan de una manera u otra en la lucha contra la pandemia. Comparte esta nota para dejar en alto todo su esfuerzo.