Shakira fue la ganadora indiscutible de la noche en los Premios Juventud 2023, en Puerto Rico. Una vez más ha vuelto a hipnotizar al mundo con su aparición en público de la mano de sus preciosos hijos Milan y Sasha, y en las redes sociales no se hace más que hablar de su conmovedor e inspirador discurso, así como de su poderío.
Y, si bien, la propia cantante quedó profundamente sorprendida, agradecida y emocionada hasta las lágrimas, con los 8 premios. Además de una importante mención honorífica: Agente de Cambio, gracias a su Fundación Pies Descalzos, y el gran aporte en la educación de su país desde que tenía 19 años; lo cierto es que quedó claro que los 2 grandes premios de los que se sintió absolutamente orgullosa y no dudó en presumir y agradecer a Dios y a la vida, fueron sus hermosos hijos de 10 y 8 años.
Sasha, el pequeño de Shakira se roba el show y termina siendo el mejor premio de la noche
Y es que, si los pequeños ya se habían robado el corazón de millones con su emotivo debut en el videoclip de Acróstico, dando a conocer al mundo sus prodigiosas y dulces voces, por supuesto que heredadas de su madre. Pero, sobre todo por su exquisita ternura, inocencia y transparencia, ahora han vuelto a sorprender a los fanáticos de la colombiana con decenas de gestos que quedaron ocultos a las cámaras en la noche del evento. Y que hablan maravillosamente bien de la gran labor que ha hecho Shakira como madre.
La barranquillera no pudo ocultar su felicidad en compañía de sus hijos, y aprovechando la presencia de Milan y Sasha, no perdió la oportunidad para dirigir un potente discurso:
‘Vivimos en un mundo ambiguo, rodeados de buena música, de belleza, de bailes de TikTok, de selfis con filtro. Pero hay realidades que no se pueden filtrar ni maquillar. Hay lugares en el que la gente que nace pobre muere pobre porque no tienen muchos la oportunidad de recibir una educación de calidad», dijo Shakira.
«Lugares donde, aunque es difícil de creer todavía, se discrimina a la gente por sus preferencias de género, por el color de la piel o por su clase social. Es un mundo imperfecto, pero que por suerte está en constante cambio. Y eso es una verdad que no se puede desperdiciar», recalcó la artista.
Más adelante, dirigiéndose a Milan, recordó:
«Cuando mi hijo de 10 años me cuenta con tristeza que un amigo suyo quisiera cambiarse el color de la piel porque no se siente parte o que algún otro está siendo apartado por sus preferencias, solo me queda como madre mostrarle que no se tiene que quedar callado, que puede levantar su mano, que puede usar su voz y que puede quejarse de eso y de todo aquello con lo que no está de acuerdo».
Y, con una gran fuerza, le dijo a su hijo mayor: «Es así, Milan. Y me alivia ver, me alivia muchísimo ver que esta juventud sabe hacerlo cada vez más».
Palabras que no dejaron a nadie indiferente, porque definitivamente estamos en un mundo en el que la juventud, y especialmente los niños, necesitan de esa orientación, y qué mejor cuando ésta no viene solo de los padres, sino también de artistas tan influyentes como la colombiana.
Pero, lo que realmente se robó todas las miradas fue la particular atención con que Milan y Sasha siguieron todo el discurso de su madre, algo que demuestra que son niños realmente educados y saben comportarse en cualquier evento en público.
Y, aunque, ciertamente, Sasha, por ser el más pequeño, en algunos momentos no pudo ocultar que le vencía el sueño, luego cuando los organizadores le dirigían palabras a su madre, fue el más emocionado, apoyándola en todo momento, al punto que tomó de su mano tiernamente y le plantó el más cariñoso y dulce de los besos.
Esos que a las madres, y especialmente a las madres solteras, les dan todas las fuerzas para seguir luchando por sus hijos, sabiendo que son su mayor tesoro, y por ellos vale la pena absolutamente todo.
Un gesto, además, muy propio del dulce Sasha, ya que se le ha visto hacer lo mismo en otras ocasiones para demostrarle a Shakira que ella es todo para él. Y, ese mismo cariño no dudó en demostrar Milan también, dándole otro gran beso a mamá, y hasta se le pudo escuchar decirle:
«Te amo mami».
En otro momento, los niños volvieron a robarse el show cuando en el photocall tuvieron que ayudar a Shakira a sostener tantos trofeos. Pero definitivamente, era demasiado peso para ambos, especialmente para Sasha. Y, sus caritas sumamente graciosas pronto dieron la vuelta a mundo, robándole el puesto a su madre y convirtiéndose en el verdadero protagonista de la velada.
Después de que todo lo sucedido en Premios Juventud se hiciera viral en las redes, la misma Shakira compartió partes de su discurso en Instagram, donde se pudo apreciar su gran sonrisa y su enorme gratitud con sus fans. Sin embargo, ella no se quedó ahí, en el momento de la euforia, la celebración y los premios, sino que quiso plasmar instantes más íntimos y personales, esos que la gente y los medios no vieron tan de cerca, pero que pasaron.
Se trata de fotos especialmente emotivas capturadas por su fotógrafo personal de las últimas semanas, Nicolás Gerardin, quien se ha convertido en su sombra.
Además de posar espectacular con su traje rojo pasión y su melena ondulada al viento, presumió unas imágenes que apuntan directo al corazón y donde el amor traspasa el objetivo.
En ellas se puede ver a la artista abrazada a sus dos hijos Milan y Sasha, en su expresión de madre más absoluta. Lo hermoso, es ver las caras de amor y orgullo de sus retoños, quienes la sostienen y protegen en ese abrazo tan lleno de verdad que lo dice todo.
Un abrazo que denota la unión entre madre e hijos y la evolución de la familia después de un año tan duro y complicado, una familia que pudo ser perfecta, pero que aprendió a recomponerse y a renacer. Tal como lo dice Shakira en Acróstico: «Se rompió solo un plato, no toda la vajilla». Y de ese aprendizaje, ella sin duda se ha quedado con los mayores premios: Sus hijos.
¿Y tú qué opinas de la gran lección de maternidad de Shakira y de la profunda devoción de Milan a Sasha a su madre?