Tristemente, no todas las personas cuentan con un hogar amoroso en el cual poder refugiarse de las inclemencias del clima y vivir con dignidad. Esta es la historia de un humilde indigente que fue encontrado en las calles de Brasil de la peor forma, dentro de una bolsa de basura, intentando protegerse el frío y la lluvia.
Todos merecen una vida digna
Todo sucedió en las calles de São Paulo, durante la fría tarde del pasado 21 de agosto, cuando la temperatura marcaba solo 10°C y el suelo se encontraba mojado por la congelante lluvia que caía sin dar tregua a las personas sin hogar.
Fue un equipo del Servicio Especializado de Atención Social de Jundiaí, quien llevó al pobre hombre a un albergue, para que pudiera tener un mejor refugio y encontraran a su familia. El albergue lo recibió de inmediato y decidió publicar una fotografía del rescate en sus redes sociales.
La desgarradora imagen conmovió a miles de internautas que no pudieron mostrarse indiferentes al pesar del hombre. Y es que, al verlo encogido dentro de la bolsa de basura, con sus pocas pertenencias al lado de él, dentro de un saco, sin nada más a la vista que su acongojado rostro, es imposible no derramar una lágrima de tristeza y empatía.
En la publicación, la terapeuta ocupacional del albergue, Melina Nucci, escribió un mensaje narrando un poco cómo se sintió al recibir al hombre después de que el equipo lo rescatara.
“Pensé que podría ser mi padre», dijo la terapeuta.
Ver al hombre en esa situación hizo que la terapeuta, así como cualquier otra persona, pensará en su propio padre.
Y tú, ¿soportarías ver a tu propio padre en la misma forma tan desgarradora?
«Como si fuera un paquete al vacío, estaba en una bolsa de basura. Me tocaba cuidarlo y lo hice con mucho cuidado porque pensaba en mi padre», escribió Melina.
Para entender mejor su situación, Melina no dudó en acercarse al pobre hombre para saber más de él. Estaba empapado en agua a causa de la lluvia y casi no tenía energías. Pese a que lo encontraron en la calle, él sí tenía familia e hijos que lo esperaban en alguna parte de la zona de Osasco, pero estaba demasiado aturdido para poder volver.
“Escribí el mensaje porque lo estaba mirando y pensé que podía ser mi padre. Sus hijos ni siquiera deben imaginar que su padre fue encontrado así. La familia vive en Osasco y no sabía de su paradero. Todos estaban muy confundidos”, señaló Melina.
En su estado, Melina consideró que lo más pertinente sería que el hombre pudiera descansar y reponerse de todo lo que había vivido. Así que le ofreció quedarse con ella, en la casa donde vivía los fines de semana. Pero, al amanecer, el hombre había huido del refugio, sin dejar rastro alguno.
Hasta el momento, se desconoce el paradero de este hombre cuya historia se viralizó y nos rompe el corazón por su crudeza. Nuestros mejores deseos están con él, dondequiera que se encuentre.
Historias como esta nos demuestran que siempre se puede ayudar a los más necesitados. Nadie está exento de sufrir una dramática situación en la que necesitemos el apoyo de otros. Comparte este gesto de generosidad.