La separación de Shakira y Gerard Piqué está siendo, por demás, la más polémica y mediática de los últimos tiempos.
Tras más de 12 años de relación, sin haber contraído matrimonio, pero con dos hijos en común, luchan por que la batalla por la custodia legal de sus hijos termine de la mejor manera afectando lo menos posible a los pequeños Milan, de 9 años, y Sasha, de 7.
Pero, lo cierto es que tras la ola de escándalos que señalan al futbolista y por lo duro que de por sí supone una ruptura, no está siendo nada fácil para los menores. Aún no se cumple el mes de la separación, y ya han sufrido el modo en que sus padres tratan de ajustar sus cuentas pendientes intentando salirse con la suya.
Shakira y Piqué ya han empezado a enfrentarse legalmente para decidir el destino de sus hijos
Ha trascendido a los medios que el régimen de custodia de los menores se está decidiendo en estos días y se ha revelado que son dos reputados despachos legales, los encargados de tratar de llegar a un acuerdo pacífico.
Shakira ha contratado los servicios del bufete de Pilar Mañé, mientras que Gerard Piqué se ha puesto en manos de Tamborero Abogados, los mismos que tramitaron exitosamente el divorcio de Arantxa Sánchez Vicario.
Ambos equipos de abogados gozan de una gran reputación en Barcelona, han representado a personajes públicos y personalidades muy conocidas. Y esta vez saben que se enfrentan a un duelo no sencillo de resolver.
Después de agotadoras jornadas de diálogo entre la cantante y el futbolista, bajo la supervisión y asesoría de expertos legales en distintas materias, no hubo un consenso. Y en vista de lo álgida que estaba suponiendo para ambos esta casi imposible negociación, se vieron en la necesidad de acudir cada uno a su propio abogado.
Ahora el terreno que pisan es escabroso, ya que cada uno mide detenidamente cómo mover sus piezas, para conseguir su objetivo principal: la custodia completa.
Shakira, por su parte, ha planteado llevarse a los niños a vivir con ella en su mansión de Miami, valorada en 10 millones de euros, la misma que estaba a la venta, pero pensando en sus hijos ya la retiró de la venta e incluso le ha hecho mejoras.
Entre sus selectos vecinos se encuentran Jennifer López, Ricky Martin y Matt Damon.
Quiere establecerse allí a fin de retomar su carrera discográfica, la misma que por más de una década estuvo condicionada por su relación sentimental, que ya no existe. A cambio de eso, ella ofrecería a Piqué un régimen de visitas bastante amplio.
Sin embargo, Piqué se opone rotundamente a que Milan y Sasha pierdan su arraigo en Barcelona. A fin de cuentas allí es donde han crecido desde que nacieron, y todo su entorno familiar: su escuela, sus amigos, sus abuelos, está en esa ciudad.
Aunque ambos padres ven la necesidad de llegar a un acuerdo, incluyendo el reparto de las vacaciones de los niños, ninguno de los dos parece dar su brazo a torcer. Sin embargo, sí son conscientes que llegar a un juicio sería extenuante y perjudicial para los pequeños, y no quisieran tener que acudir a ese extremo.
Los abogados mencionan que creen que en una semana como máximo ya se llegue a una solución para ambas partes.
Muchos de los seguidores de la pareja se han puesto a favor de Shakira, independientemente de la causa de la ruptura, ya que piensan que los niños siempre estarán mejor con la madre.
Otros aprueban el hecho de que sacar a los niños de su entorno podría ser perjudicial, sin embargo dudan seriamente de que Piqué pueda ejercer como padre, especialmente por el nuevo ritmo de vida que tiene y el ejemplo que les puede dar a los pequeños.
Déjanos saber en los comentarios qué opinas sobre esta delicada situación que afecta principalmente a los más inocentes: los pequeños Milan y Sasha. ¿A quién crees que le corresponde su custodia?