«La desconfianza comenzó cuando me di cuenta de que faltaba dinero en mi caja», así introduce el video un dueño de una tienda en Brasil, que presenció cómo una ladrona fue sorprendida gracias a la dolorosa trampa que él mismo se la puso.
Al parecer el contrariado dueño de un local comercial de Belo Horizonte, en Minas Gerais, Brasil, no pudo más de la indignación al ver cómo con cierta frecuencia desaparecía el dinero de su caja, que con tanto esfuerzo llegaba allí y con la misma facilidad desaparecía.
Hasta que tras recibir diferentes tipo de consejos de clientes y amigos para poder dar con el ladrón, como poner cámaras ocultas o instalar un mejor sistema de alarmas, su esposa decidió que querían atrapar al ladrón «con las manos en la masa».
«Así que tuvimos la idea de poner una trampa para ratones en la caja y usé el teléfono para registrar el momento», dijo el hombre.
Todo estaba preparado para que el ladrón o la ladrona se encontrara con la dolorosa sorpresa en el momento en que se aficionara del dinero ajeno, mientras el teléfono lo grababa todo.
Fue entonces cuando el pasado 15 de agosto, entró una mujer a su tienda, como muchas otras, y en el video se la puede ver conversando de una manera confiada con el dueño, por lo que se presume que es cliente habitual.
Pero en el momento en que el hombre deja «descuidado» el mostrador, ella no desaprovecha ni un segundo y enseguida trata de abrir el cajón donde se guardaba el dinero. También se puede intuir que está muy familairizada con el cajón, y como si lo conociera de toda la vida, va directo al dinero.
Inmediatamente viene lo menos pensado: la trampa esperaba por ella, y tras remorderse los dedos, rápidamente saca la mano como si nada.
Claramente trata de disimular y se mantiene seguramente aguantando el dolor.
Lo increíble es que no se da por vencida. La obstinada y sin vergüenza mujer intenta una vez más y asegurándose de no ser vista, vuelve a introducir la mano en el mencioando cajón. Pero para ese momento ya el ruido ocasionado por la trampa, alertó a los dueños, que ya la tenían totalmente identificada a la ladrona.
Finalmente, se puede ver al dueño de la tienda que regresa al mostrador y detiene la grabación. Por fin tenía la evidencia de quién se estaba sustrayendo todo su dinero, y lo mejor de todo, al menos había recibido su merecido. Así la justicia, hasta sabe mejor.
Déjanos saber qué te parece la original idea que tuvo esta pareja para dar con la ladrona. ¿Qué le habrías dicho a esta desfachatada mujer? Compártelo en tus redes.