Sara Morán, de Chorrillos en Lima, Perú, sintió que perdió parte de su alma cuando su mejor amigo murió envenenado. Pero lo que ella hizo después de ese terrible acontecimiento dejó con la boca abierta a los medios de comunicación de su país y del mundo entero. Decidió sacar coraje y fundó una asociación de ayuda a perros con discapacidades. La llamó Milagros Perrunos.
Aquí está Sara en su fundación con «Cabezón» uno de sus perros más queridos.
La pérdida de Oso hizo que Sara se deprimiera mucho, pero también le dio el valor para ayudar a los canes que lo necesitan a los que lleva cada semana a pasear a la playa de Pescadores.
Cuando Sara seguía triste conoció a Ana María Guerrero, que le ayudó a superar la muerte de Oso. Ya que Sara tenía el deseo de ayudar a los perros, ella acompañaba y ayudaba a Ana y comenzó con ella a vacunar y esterilizar perros casa por casa.
Desgraciadamente su amiga murió pero Sara continuó con su deseo de ayudar desde 2007 y de ahí surgió «Milagros Perrunos», un albergue para perros con discapacidades. Ahora ella se encarga de 40 perros con discapacidades
Sara organiza paseos en la playa con sus «guerreros en ruedas», que es como Sara los llama. Estos paseos demuestran que estos perros, a pesar de tener varias discapacidades, pueden disfrutar de la playa como cualquier otro perro.
Milagros Perrunos demuestra que de algo deprimente y malo puede salir algo divertido y hermoso
Aquí vemos a Sara Morán (a la derecha, polo blanco) paseando a los perros discapacitados junto con otras dos voluntarias
Cabezón y Pecas fueron encontrados en la calle donde habían sido maltratados tras ser abandonados por su condición. Ahora todo ese dolor quedó atrás.
«Pelusa» persigue a las gaviotas mar adentro 🙂
¡Qué manera tan excelente de superar la perdida de un ser querido! ☺ Si quieres ayudar a Sara con su fundación con un donativo o para adoptar a alguno de sus perros puedes contactarlos en el correo electrónico albergue@milagrosperrunos.org o a través de su página de Facebook.