Uno de los problemas más recurrentes entre las parejas con hijos que se divorcian tiene que ver con el pago de manutención. Y recientemente un padre en los Estados Unidos dejó en evidencia su enorme frustración, lo que hizo cuando correspondía entregar el último pago de manutención a sus hijas sorprendió a todos.
Jamás esperó esa acción de parte de su padre
El hecho ocurrió en Richmond, Virginia; Avebry Sanfordestaba cumpliendo dieciocho años y se encontraba en sus clases en la Deep Run High School donde estudia el último año, mientras su madre y hermana estaban en casa.
La relación con su padre no había sido nada buena en los últimos años y por lo visto cumplir con los gastos de las hijas se había convertido en una carga pesada e incómoda para el hombre durante todo este tiempo
El padre llegó a la casa en un remolque que había alquilado especialmente para realizar lo que tenía en mente, sería el último pago que haría a sus hijas y decidió hacerlo a su manera. Llenó el remolque con 80.000 monedas de centavos de dólar equivalente a 800 dólares, se bajó del vehículo y vació su metálico contenido en el jardín.
“Acabo de cumplir 18 años. Cuando estaba en medio de la clase, mi papá vino. Había alquilado un remolque. Se detuvo frente a la casa y encendió el remolque para que tirara todos los centavos al césped”, relató la disgustada hija.
Glen Allen, la madre de Avebry se dio cuenta de lo que estaba ocurriendo y salió de inmediato para preguntarle qué era lo que estaba haciendo. El hombre hizo lo que tenía planeado tranquilamente, y su rostro denotaba la satisfacción que le producía su extraña hazaña.
“¿Qué estás dejando caer en mi jardín?”, le dijo la mujer.
No se negó a responder a quien había sido su pareja hacía mucho tiempo, su repuesta fue breve y concisa, se trataba del pago final de la manutención. El desafortunado suceso fue bastante desagradable para la familia, lo sintieron como una gran falta de respeto y vergüenza. Avebry expresó lo que sentía con maduras y sentidas palabras.
“No es solo a mi madre a quien está tratando de avergonzar, también somos mi hermana y yo. Es molesto que no lo haya considerado antes de hacerlo”, aseguró la hija.
Las imágenes quedaron grabadas en la cámara de seguridad, Glen denunció el incidente a la policía y el teniente Matt Pecka lo manejó como un hecho doméstico, pero la madre no quiso presentar cargos.
Decidieron reconvertir la situación en algo bueno y útil, recogieron todas las monedas y las donaron a la organización Safe Harbor, que trabaja para prevenir la violencia doméstica. Avebry no piensa más en eso, se está preparando para su graduación y posterior ingreso a la universidad Virginia Tech en el otoño.
Comparte este insólito caso que ha generado tantos comentarios por el gesto del padre de la joven. ¿Cómo reaccionarías tú en su lugar?