Debido a la pandemia por el COVID-19 el uso del oxígeno medicinal se ha convertido en prioridad y muchos comerciantes se han solidarizado con la necesidad del pueblo. Como un empresario peruano que distribuye el vital oxigeno, pero por desgracia no escapó de las garras del terrible virus.
Mario Romero Pérez es un comerciante peruano de 62 años y dueño de OxiRomero Group, una empresa encargada de distribuir oxigeno medicinal en la avenida Defensores de Lima 603 de San Juan de Miraflores, y también en el Callao.
Mario se dio cuenta de que debía ponerse del lado de las personas que necesitaban el oxígeno, y a pesar de que la escasez del producto iba en aumento, él siguió manteniendo los precios establecidos para que pudieran adquirirlos.
En OxiRomero Group el precio justo de cada metro cúbico de oxígeno es de 4,28 dólares. Otros han llegado a vender cada balón de diez metros cúbicos entre 500 y 1.950 dólares. Tomando en cuenta que uno solo puede durar veinticinco horas, los gastos de mantener a un paciente con oxígeno son alarmantes.
A Mario y otros tantos comerciantes de buen corazón se les llama ‘Ángel del oxígeno’. Pero hace unos días se supo que se había contagiado por el COVID-19, y fue llevado a una clínica privada que le pidió unos 3.500 dólares de garantía para internarlo por solo doce horas de atención.
Se presume que Mario pudo haberse contagiado porque él mismo se encargaba de ordenar las filas de las personas que iban al establecimiento desde la madrugada a comprar oxígeno, para llevarlo a sus familiares que estaban hospitalizados.
Ahora está recluido en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Guillermo Kaelin de Nueva Esperanza, en el distrito de Villa María del Triunfo. Su edad es un agravante en estos casos, el pasado viernes 10 de junio su estado de salud se complicó.
“Lamentablemente tiene un mal curso, llega a ser un cuadro de hipoxemia severa asociado a un cuadro infeccioso el cual se está confirmando ahora, y una neumonía del hospital, nosotros le decimos neumonía asociada a los cuidados de la salud por lo cual lleva a una insuficiencia respiratoria severa”, dijo Eric Mario Romero, médico e hijo del comerciante.
Eric hizo un llamado para que establecimientos de salud y farmacias dejen de lucrarse con la desgracia, también informó que han recibido donaciones de ciudadanos desinteresados, pero no tienen urgencias económicas y decidieron devolverlas.
“Ya se ha reembolsado a los dueños, con la secretaria de la empresa estamos coordinando la devolución, ya se le ha devuelto a más o menos veinte personas, se agradece a esas personas de buen corazón”, expresó el agradecido médico.
Eric le solicitó a quienes se han preocupado de la salud de su padre a que eleven oraciones por él, y por todos los que están luchando por su vida contra el coronavirus en tantos hospitales de su país y del mundo.
“Si pedimos es oración, no solo para mi padre sino para todas las personas que están sufriendo en unidades críticas en hospitales y sus familiares que lamentablemente hacen colas para buscar una medicina o buscar o buscar oxígeno”, añadió el hijo.
Los mejores deseos para que el comerciante gane la batalla en estos momentos duros que está viviendo necesita más que nunca de la solidaridad y el apoyo de todos.
No dejes de compartir esta dramática historia con tus amigos y conocidos, pidamos juntos por la salud de Mario.