Swami Sivananda, es un monje hindú conocido por decir que tiene el mejor método para no envejecer, y hace poco reveló los secretos mejor guardados hasta ahora para tener una vida larga y saludable.
Y es que, según su documentación, el anciano gurú de la inmortalidad nació en 1896, es decir, hoy en día cuenta con 123 años de andar por la vida.
Pero, te estarás preguntando: ¿cuál es la fórmula? Simple. El monje afirma sin cortapisas que el truco para ‘burlar a la muerte’ es observar tres rutinas esenciales: practicar yoga, no tener sexo y comer sano, específicamente alimentos sin picantes. ¿Te parece aburrido? Tal vez, pero es efectivo, según su pasaporte.
Dice no haber practicado jamás algún tipo de relación íntima, pero es un yogui muy entusiasta que pasa al menos cuatro horas diarias en su saludo al Sol. Además, Sivananda observa un estricto régimen de austeridad y ha intentado figurar y ser reconocido por el afamado Libro Guinness de los Récords, trámite que se ha estancado en los últimos tiempos ya que su fe de nacimiento proviene de un templo hinduista.
Swami Sivananda es proveniente de la ciudad sagrada de Varanasi
Actualmente se continúa considerando a la francesa Jeanne Louise Calmentcomo la persona más longeva de la historia, tras haber fallecido en 1997 a los 122 años y 164 días.
“Llevo una vida simple y disciplinada. Como muy simple, solo alimentos hervidos sin aceite o especias. Especialmente arroz y daal hervido (guiso de lentejas). Y luego realizo una sesión de yoga de varias horas”, explicó el monje.
Proveniente de la ciudad sagrada de Varanasi, el menudo hombre de 1,58 centímetros de altura creció, como era de esperarse, en la pobreza extrema y decidió convertirse en monje. Duerme sobre una estera en el piso y usa una losa de madera como almohada.
“Evito tomar leche o frutas porque creo que estos son alimentos sofisticados. En mi infancia dormí muchos días con el estómago vacío”, dijo.
El hombre asegura no querer publicidad o lucro, por eso dice no haberse presentado con anterioridad a reclamar su puesto como el hombre más longevo del planeta, pero finalmente sus acólitos lo convencieron de que lo hiciera.
Criado por un padre espiritual al perder a sus padres biológicos, Savinanda, quien nació en la India de la era colonial, sin electricidad, automóviles o teléfonos, dice que no le entusiasma la nueva tecnología y prefiere la soledad y el aislamiento del mundo.
Sin embargo, es independiente, sano y hasta viaja en trenes como cualquier adolescente que se respete.
La filosofía del yoga se basa en el principio de desapego a nuestra existencia mortal, por ende, la prolongación de la vida siempre ha sido un “efecto secundario” muy convincente y característico del yoga. Para muestra, nuestra historia de hoy.
Comparte esta historia con tus familiares y amigos y, ya sea a través del yoga o de la práctica de un deporte y de una alimentación sana, la idea es tener calidad de vida y vivir más años, y eso sí, no precisamente dejar de disfrutar las relaciones carnales.