El pasado domingo, antes de las ocho de la mañana, una vecina de la comunidad de Las Heras, en Mendoza, Argentina, se despertó por los constantes ladridos del perro de su vecino.
No era usual que ladrara tanto, así que pensó que podría estar sucediendo algo irregular. Se levantó de su cama y desde la ventana de su habitación notó un bulto envuelto en mantas que yacía en el pavimento, justo frente a su casa.
“Me pareció sospechoso, pero no tuve miedo y me acerqué para ver qué era”, dijo Mónica.
Ante la incertidumbre, Mónica, decidió salir y acercarse para ver de qué se trataba. Notó que aquel paquete se movía, cuando abrió las mantas descubrió que era un bebé recién nacido.
De inmediato sostuvo al bebé en sus brazos y entró con él a su casa, junto a su hija comprobó que estaba recién nacido.
“No lloraba, pero sí se quejaba. Le dimos abrigo, pero no lo tocamos mucho porque todavía tenía adherido el cordón umbilical”, declaró Mónica durante una entrevista que ofreció a un medio de comunicación local.
Poco después de abrigar al bebé llamó a los servicios de emergencia, habían transcurrido algunos minutos cuando llegó la policía y trasladaron al menor al hospital Carrillo.
En el centro de salud lo evaluaron para comprobar su estado de salud, fue ingresado en la unidad de neonatología. El bebé pesó 2,600 kilos, nació a las 38 semanas de gestación, afortunadamente estaba saludable.
Mónica recibió información sobre el pequeño, su angustia disminuyó cuando supo que tenía la atención médica que necesitaba, le enviaron fotos del bebé en el interior de la incubadora. El personal sanitario bautizó al niño como Joaquín.
El domingo en horas de la tarde, Mónica se dirigió al hospital para visitar al pequeño a quien le había salvado la vida, le llevó ropa, pañales y también una cuna que le donó la gobernación.
Mónica trabaja en la Municipalidad de Las Heras y con el apoyo de su esposo se dedica a hacer a participar en actividades de voluntariado para ayudar a las personas más vulnerables.
“Me gustaría seguir en contacto con el bebé en el futuro”, dijo Mónica.
Muchos usuarios de las redes se han sentido conmovidos por este caso y admiran cómo el perro fue capaz de alertar a alguien después de ver que habían dejado a un bebé en la calle abandonado. Fue gracias a sus ladridos que Mónica se levantó de su cama para ver qué ocurría.
Hasta el momento se desconocen los detalles de la investigación de los agentes de policía sobre los padres del menor. Comparte esta noticia.