La magistrada Mariana Josefina Rey Galindo, es una jueza Civil en Familia y Sucesiones de Monteros que el pasado 07 de febrero leyó el fallo que emitió con un texto adaptado una niña de 9 años.
Ella demostró que la justicia puede emitir textos en un lenguaje comprensible para las personas que estén involucradas.
En este caso, la juez debía decidir sobre la custodia de una menor de quien se preservan los datos, pero que será identificada como Juli.
Juli vive en Amaicha del Valle y tiene “tres padres”, su madre y su padre biológicos y un hombre que la reconoció como su hija. La niña le dijo a la magistrada que los consideraba a los dos como sus padres.
Así que en el fallo emitido sobre su custodia había un apartado del texto para explicarle a la niña en qué consistía su sentencia, los motivos de la decisión y además, dejarle claro cuáles obligaciones tendrían que cumplir sus padres.
“Juli, tienes razón cuando dices que no quieres elegir entre tus dos papás”, así comienza el fallo.
Los padres de Juli se disputaban el derecho de paternidad de la niña, y la magistrada tomó una decisión que acabó con la controversia, pero, además, se dedicó a escribir un texto que ha emocionado a todos.
“Juli tienes razón cuando dices que quieres elegir entre tus dos papás. Tienes derecho a conservar a los dos: al papá Roberto y al papito Jorge. También tienes razón al no permitir a los grandes que te exijan este tipo de elección. No hay nada que elegir”.
“A Juli le encantan las matemáticas, quiere ser maestra cuando sea grande. Durante la semana vive con su papá Jorge, su hermana Nair, de 11 años e Hilda, hermana de Jorge. Los fines de semana vive con su papá Roberto y su hermana Jade. La madre de Juli se llama Lucía y vive en otro lugar. En la casa de su madre están sus dos hermanos menores, Ludmi y Nico, ambos son muy chiquitos según nos cuenta Juli”.
Así quiso hacer el relato la juez, para que la sentencia tuviera un lenguaje claro y pocas vueltas jurídicas para abordar el caso en el cual un hombre reconoció a una menor como su hija, pero realmente su padre biológico era otro. Para la niña, ambos son sus padres.
La magistrada Mariana Josefina Torres cumplió con los tecnicismos que obligatoriamente debía incluir en el fallo, pero los ubicó en citas al pie o las acotó entre paréntesis.
Lo que más conmovió a todos es que el fallo era comprensible para la niña de 9 años.
“Tú no tienes que elegir entre Jorge y Roberto. Porque según lo que hablamos y me hiciste saber, es que sientes que los dos son tus papás. Listo, eso es lo importante. Y así lo voy a escribir en esta sentencia”, continua el fallo.
“Te anticipo que voy a reconocer legalmente ese derecho a tener a tus papás en los papeles (a los dos) y a reconocer el derecho a vivir de esa forma y en familia. Esto quiere decir, que voy a hacer que el Estado registre en tu acta de nacimiento a Roberto además de Jorge y Lucía. A los tres: con lo cual tú vas a tener en los documentos dos papás y una mamá. Y con eso, ellos tres tienen los mismos derechos y obligaciones (ellos contigo y tú con ellos)”.
Además, detalla cuáles son las obligaciones de sus tres padres: “Cuidarte, acompañarte en la vida y asegurar tu bienestar físico y económico (alimentos, vivienda, estudios, entre otros). Entre ellos deben organizarse para cuidar de ti (autorizaciones para salir de viaje fuera del país, si decidieras casarte siendo menor de edad, derechos de comunicación contigo, cuidados personales y esas cosas ¿sabes?)”.
Además, del texto cercano que ofreció la magistrada considerando la sensibilidad y la capacidad comprensiva de la niña de 9 años, se preocupó por usar una tipografía que aportara familiaridad y calidez a la pequeña.
Después de dirigirse en el fallo de la sentencia a la niña, la juez puntualizó la situación para aclarar las posibles dudas sobre el caso.
Primero asegura que el origen biológico de Juli no fue controvertido, Roberto afirma ser el padre biológico y Jorge no lo niega, pero alega el vencimiento del plazo de legal para reconocer a su hija.
La menor sabe que es hija de Roberto. Asimismo, aclara que la familia nuclear de la niña (padres, niñas, hermanas y madre) así como la familia ampliada (abuelos y tíos) actúan según los lazos afectivos, biológicos y legales.
Roberto quiere que él sea reconocido como padre legalmente mientras que Jorge quiere conservar su derecho. Mientras que la niña pide que se defienda su derecho de conservar a sus dos padres.
La magistrada se dirige a la niña en el fallo de la sentencia por segunda vez usando otra tipografía:
“Juli, quiero volver a invitarte a conversar conmigo, ya que esta decisión es fruto de haberte escuchado, cuando me hiciste ese pedido tan importante para ti. Por eso también es una respuesta muy importante.
Para eso puedes venir al juzgado aquí en Monteros cualquier día por la mañana o si quieres me avisas y yo voy hasta Amaicha y así te explico todo lo que aquí está escrito, y tú me cuentas qué te parece, también voy a invitar a tus padres para que les explique personalmente lo que significa esta sentencia. Otra opción es que me puedas llamar a mi teléfono móvil, aquí te lo paso”.
El fallo de esta sentencia se emitió el pasado 07 de febrero y se hizo viral desde que se difundió en las redes. Muchos aplauden que la justicia pueda ser más sensible y cercana a la gente, más humana, sobre todo con los niños. Compártelo.