Sean frescas o congeladas, solas o preparadas con otros alimentos, pocas personas pueden resistirse a una fresa. Nadie puede negar que es una de las frutas más populares y deseadas; es sabrosa, tentadora, vistosa y tiene muchos beneficios para la salud del ser humano.
Aprende los 10 beneficios para la salud que trae el consumo de fresas. Te aseguro que después de leer este artículo no podrás negarte a incluirlas en tu dieta diaria.
1. Las fresas refuerzan el sistema inmune
Tienen muchos antioxidantes, especialmente Vitamina C, un componente esencial para el ser humano. La mayoría de los mamíferos no tienen la habilidad de producir naturalmente Vitamina C, que es importante para la vida y el funcionamiento del organismo.
Una porción de fresas contiene 51,5 mg de vitamina C, casi la mitad de lo que necesitamos diariamente. Esta vitamina es conocida por su capacidad de fortalecer el sistema inmunológico, además de trabajar como antioxidante.
Según un estudio de la Universidad de California (UCLA), el poder antioxidante de las fresas trabaja en la sangre incluso cuando se consumió semanas atrás.
2. Las fresas mejoran la visión
Las propiedades antioxidantes de las fresas pueden ayudar a prevenir las cataratas y los factores que pueden envejecer a los ojos con la edad. Nuestros ojos requieren de Vitamina C para protegerse de la exposición de los radicales libres del Sol y de los rayos UV, que pueden dañar la proteína de nuestros ojos.
La Vitamina C también juega una parte importante en el fortalecimiento de la córnea y la retina.
3. Las fresas ayudan a combatir el cáncer
La Vitamina C es uno de los antioxidantes que pueden ayudar a la prevención del cáncer, ya que un sistema inmunológico sano es la mejor defensa. Un fitoquímico llamado ácido elágico también se encuentra en las fresas, que se ha comprobado que tiene propiedades anticancerígenas, suprimiendo el crecimiento de las células cancerígenas.
Las fresas también contienen antioxidantes como la luteína y zeaxantina, que eliminan los radicales libres y neutralizan el efecto potencialmente negativo que pueden tener en nuestras células.
4. Las fresas ayudan a retrasar la aparición de arrugas
Nuevamente, el poder de la Vitamina C hace que las fresas sean vitales en la producción del colágeno, que ayuda a mejorar la elasticidad y recuperación de la piel. Cuando envejecemos perdemos colágeno y debemos encontrar fuentes que reemplacen esta pérdida para mantener la piel joven.
Asimismo, investigadores de la Universidad de Hallym en la República de Corea aseguran que el ácido elágico previene la destrucción del colágeno y la inflamación que produce el desarrollo de las arrugas en la células de la piel del ser humano.
5. Las fresas combaten el colesterol malo
Gracias al ácido elágico causan efectos antioxidantes que pueden beneficiar la salud del corazón, al ser un agente antiinflamatorio.
Además desde la Clinical Nutrition and Risk Factor Modification Center de Toronto estudian los efectos de las fresas en la baja del colesterol y han observado que comer regularmente esta fruta reduce el daño oxidativo así como las grasas, algo que favorece al corazón y a quienes tienen diabetes.
6. Las fresas reducen la inflamación
Los antioxidantes y los fitoquímicos de las fresas reducen la inflamación en las articulaciones, reduciendo el peligro de artritis. Un estudio de Harvard School of Public Health muestra que las mujeres que comen 16 o más fresas por semana tienen un 14% menos de probabilidades de elevar la proteína C reactiva (CRP), una indicación de la inflamación en el cuerpo.
7. Las fresas regulan la presión sanguínea
El potasio es otro nutriente sano para el corazón y con 134 mg de fresas se puede obtener una «fuente mediana” de este mineral, según muestran las investigaciones del Alberta Health Services. El potasio puede ayudar a regular la presión arterial e incluso a disminuir la presión arterial alta, actuando como un amortiguador contra los efectos negativos del sodio.
Con su impacto en la reducción del colesterol, la inflamación y la presión arterial alta, las fresas se han ganado el título de ser una de las frutas más saludables para el corazón.
8. Las fresas que brindan fibra
La fibra es necesaria para una digestión saludable y las fresas contienen naturalmente cerca de 2 g por porción. La falta de fibra puede producir estreñimiento y diverticulitis (una inflamación de los intestinos) que afecta a aproximadamente el 50% de las personas mayores de 60 años.
La fibra también puede ayudar a combatir la diabetes Tipo 2, ya que retarda la absorción de azúcares (es decir la glucosa) en la sangre.
9. Las fresas ayudan a controlar el peso
Mantener un peso saludable es una de las mejores defensas contra la diabetes Tipo 2 y las enfermedades del corazón, considerando que es bueno para el bienestar general.
Las fresas son naturalmente bajas en calorías (alrededor de 28 kCal por porción), sin grasa y bajas en sodio y azúcar. Las fresas contienen azúcares naturales y el contenido total de carbohidratos equivale a menos de la mitad de una rebanada de pan.
10. Las fresas ayudan a la salud pre-natal
El folato o ácido fólico es una vitamina B recomendada para las mujeres que están embarazadas o tratando de concebir, y las fresas son una buena fuente de esta vitamina, con 21 mg por porción.
El ácido fólico es necesario en las primeras etapas del embarazo para ayudar en el desarrollo del cerebro del bebé, el cráneo y la médula espinal. Las fresas puedeN ayudar a prevenir ciertos defectos de nacimiento como la espina bífida.
Y, sobre todo, las fresas ¡son exquisitas! ¿Necesitas más razones para comerlas?
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