Con el avance de la pandemia del coronavirus, el reconocido parque Disneyland cerró sus puertas para decepción de millones de niños, menos para los nietos de Steve Dobbs, quien le ha dado la mejor alternativa a su familia durante el confinamiento después de 10 años de trabajo.
Este abuelo y sus nietos ahora pueden ir al divertido parque “Dobbsland” las veces que quieran con tan solo ir a patio de su casa. El pequeño parque temático cuenta con su propia Main Street USA, la montaña rusa Madderhorn y un Sleeping Princess Castle.
Durante una década Steve hizo el parque considerando todos los detalles.
Este abuelo creó un paseo con temática de Piratas del Caribe para sus nietos mayores, quienes ahora son adolescentes, y continua la construcción para sus hermanos menores y primos.
Realmente el parque se ha convertido en un lugar especial para que toda la familia se reúna en medio del confinamiento del coronavirus.
Steve y su nieta Ruby de 10 años pasaron parte del encierro trabajando en la última atracción del parque temático, el Safari Ride.
Este paseo consiste en un trineo mecanizado que se detiene en varias estaciones que simula zonas exóticas del mundo.
«Todo fue su idea. Yo la ayudé, pero ella lo diseñó en el ordenador, con la animación y todo”, dijo orgullosamente el abuelo Steve.
Trabajar junto a su nieta ha sido muy satisfactorio, ambos construyeron una escena de “Sabana africana”, una del “Desierto de Alaska” y otra de las “Ruinas de la jungla del sudeste asiático” con una serpiente falsa diseñada en una impresora 3-D.
El parque temático ayuda a los niños pequeños a aprender habilidades para la vida real además de estimular su imaginación.
«Todo lo que hacen es parte de su educación», afirmó Steve.
Steve actualmente enseña a tiempo parcial en Cal Poly Pomona y sus estudiantes también han participado en la construcción de su parque temático, de hecho, la montaña rusa Madderhorn, que sube a 12 mph, fue un proyecto de último año para nueve estudiantes de la escuela.
Para garantizar el cumplimiento con las normas de seguridad Steve contrató al mismo equipo de ingeniería que aprueba los viajes de Disney.
“Les dije, será mejor que lo aprueben porque mis nietos van a montarlo”, agregó el abuelo.
El próximo proyecto que abrirá el Dobbsland es un divertido “paseo en tirolesa de Harry Potter Quidditch”, en donde los ciclistas intentarán lanzar una snitch dorada a través de un objetivo en movimiento mientras se deslizan en el aire.
Realmente este abuelo le ha regalado a sus nietos y a su familia la mejor opción donde pasar días de extrema diversión. Compártelo.