Los habitantes de Chicago se encuentran enfrentando temperaturas terriblemente bajas debido a una ola de frío proveniente del ártico. En estas situaciones las personas sin hogar corren mucho peligro. Varias organizaciones y refugios se encuentran dando lo mejor de sí para poder socorrer a cientos de personas que no cuentan con un techo sobre sus cabezas.
Al menos 15 personas sin hogar han fallecido a causa de la ola de frío.
En un campamento en Chicago, un grupo de personas sin hogar debió enfrentar un enorme riesgo por la inesperada explosión de un tanque de propano en la cercanía de sus carpas.
Muchas personas quieren ayudar a quienes se encuentran en la calle así que han recibido constantes donaciones de cobijas, ropa, carpas y tanques de propano para que puedan mantenerse abrigados y enfrentar las bajas temperaturas lo mejor posible.
En total vivían 70 personas sin techo en este campamento.
Sin embargo, las autoridades habían recomendado no donar más tanques de propano por el posible riesgo de explosión. Este campamento de Chicago ya contaba con 100 tanques depropano para mantenerse calientes, así que las autoridades comenzaron a preocuparse.
Se espera que en los próximos días la temperatura de Chicago sea más baja que la de la Antártida.
Como muchos temían uno de los tanques de propano explotó haciendo que ese campamento tuviera que ser completamente evacuado.
“Estaba saliendo de mi tienda y escuché una explosión. Cuando me asomé sólo veía humo”.
Afortunadamente ninguna persona salió herida, pero la vida de todos seguía en alto riesgo si no encontraban pronto un lugar para poder pasar la noche al resguardo del frío. La Organización Salvation Army fue la primera en llegar al campamento. Encontrar un techo para tantas personas y en tan poco tiempo no sería tarea sencilla pero comenzaron a hacer llamadas telefónicas para intentar conseguir refugios.
“Era cuestión de vida o muerte para cualquiera”.
Por suerte, cuando comenzaban a confirmar que todos los refugios estaban completamente saturados, llegó una noticia que salvaría el día. Un donador anónimo se había ofrecido a pagar habitaciones en un hotel para poder dar resguardo a las 70 personas sin hogar que se vieron afectadas por la explosión.
“Es maravilloso que alguien pueda darle un lugar caliente y seguro a todas estas personas al menos por unos días. Estamos muy felices”.
El misterioso donador aclaró que desea permanecer bajo el anonimato y lo mejor de todo es que su bondadoso acto de ayuda ha inspirado a muchas personas a que sigan realizando donaciones.
“Al menos podrán tener una cama y una ducha caliente”.
Las redes han celebrado efusivamente este enorme acto de bondad. El donador anónimo ha sido señalado por muchos como un héroe y un ángel.
Te invitamos a compartir esta nota para celebrar que todavía hay mucha bondad en el mundo.